El Rossonero venció 3 a 1 al Genoa y sigue en carrera en el certamen doméstico.
Milán necesitó el tiempo suplementario para sacarse de encima a un duro rival como Genoa que, pese a estar en el decimonoveno puesto de la Serie A, realmente hizo un muy digno partido. Se puso en ventaja y dominó la primera mitad pero en el segundo tiempo y en el tiempo extra se vio superado y quedó fuera del certamen.
La primera situación de peligro la generó el conjunto local con un cabezazo de Rade Krunic que dio en el travesaño. La visita respondió rápidamente y tuvo dos ocasiones. La primera fue un remate de Zinho Vanheusden que contuvo bien Mike Maignan y la segunda fue gol. Manolo Portanova lanzó un tiro de esquina y el noruego Leo Skiri Ostigard puso el 1 a 0 con su cabeza. La realidad es que Genoa terminó mucho mejor la primera mitad y estuvo muy cerca de ampliar la ventaja con Portanova en una muy buena jugada asociada con Kelvin Yeboah.
El complemento si que fue distinto porque el Milán hizo todo lo posible como para igualar las acciones. El arquero visitante Adrián Semper le atajó un disparo en el área a Matteo Gabbia. La parda llegó con un potente cabezazo de Oliver Giroud. En el tiempo suplementario los de Stefano Pioli mostraron su poderío ofensivo y resolvieron la cuestión. El 2 a 1 lo marcó Rafael Leao en una jugada rara en la que parece intentó tirar un centro y la metió en el arco con ayuda del palo. Y el 3 a 1 lo selló el belga Alexis Saelemaekers en un gran contragolpe. Los Rojinegros avanzaron a los cuartos de final y esperan por el ganador de Lazio y Udinese.