En un partido mediocre pero con un final lleno de emociones, Estudiantes venció 1 a 0 a Brown con un gol en el minuto 90 de Fernando Joao, quien había ingresado 15 minutos antes. Aunque el empate le sentaba perfecto a un encuentro que no tuvo muchas chances de gol, el Pincha arremetió sobre el final y concretó un gol que le da 3 puntos y lo deja a igual cantidad de unidades de la punta. Se ilusiona Caseros.
Para analizar este partido, en lugar de dividirlo en dos tiempos de 45 minutos cada uno, sería más conveniente separarlo en los primeros ochenta y los últimos diez minutos.
Los primeros ochenta minutos fueron parejos y con escasas llegadas por parte de ambos conjuntos, aunque el local tuvo en sus individualidades una ventaja, ya que los jugadores importantes de Brown no aparecieron en todo el partido. Apenas algunos remates aislados que los arqueros no tuvieron problemas en contener fueron lo más interesante de gran parte del cotejo.
Los protagonistas de los primeros 80 minutos fueron los volantes de contención de ambos equipos, Bochi en el Pincha y Pereyra en el Tricolor. En ellos recayó la responsabilidad de la marca, y dejaron la vida en cada pelota que iban a trabar, a correr o a recuperar, a la vez que no dejaron respirar a sus rivales. Dos leones.
Tomando en cuenta estos 80 minutos, el empate era lo más justo, sin embargo, en los últimos 10 minutos, se despertó Estudiantes. El equipo de Kopriva aprovechó los errores defensivos de los dirigidos por Pablo Vico y explotó la velocidad de Gomez y Joao, ambos ingresados sobre el final. El local perdonó en cinco oportunidades a su rival, ya que erró varias situaciones inmejorables para marcar. Pero finalmente, de tanto ir, consiguió en el minuto 90 el gol que le hace soñar con el ascenso.
Con el triunfo, Estudiantes queda a dos puntos de Brown y a 3 de Defensores de Belgrano, líder del campeonato. Así, cualquiera se ilusiona…