Los azules y amarillos golearon por 4 a 0 al ex combinado soviético de los bielorrusos. Sin embargo, esa victoria no sólo sirvió para recuperarse del duró traspié ante Bulgaria del jueves pasado, sino también para escalar posiciones aprovechando que increíblemente Luxemburgo le arrebató dos puntos de oro a Francia en Toulouse.
Suecia recuperó la sonrisa. Aprovechándose de un débil rival, cosechó tres puntos para quedar como único escolta de Los Tricolores y aspirar todavía a la clasificación directa a Rusia 2018. Belarús no tuvo nada que hacer en Borisov ante los dirigidos por Jan Andersson que volvieron a ser una máquina imparable.
La muestra de la gran diferencia entre los escandinavos y los ex soviéticos pudo notarse incluso en el primer gol de la jornada. El arquero local, Sergei Chernik salió a cortar un centro que ni siquiera aparentaba ir al área. Así quedó en mitad de camino y se encontró con Emil Forsberg que, a la carrera, bajó el esférico, lo controló, esquivó al guardameta y con todo el arco a su merced puso el 1 a 0.
Iban tan sólo 18 minutos y rápidamente Suecia volvió a anotar. Si la apertura del marcador fue un regalo, el segundo grito de la visita fue otro obsequio. Mikhail Sivakov intentó salir jugando del fondo y perdió la pelota ante la presión de Christoffer Nyman que, en un mano a mano, no perdonó. Ya completamente perdido mentalmente, Belarús le hizo un moño a su oponente para el tercero donde Marcus Berg corrió más de 30 metros sin marca para romperle el arco a Chernik.
Para completar la nefasta noche, el arquero local le dio un penal a los azules y amarillos. Andreas Granqvist, el capitán, cambió la pena máxima por gol y selló la victoria que los deja como escoltas de Francia a tan solo un punto del combinado de Didier Deschamps.
Belarús, quedó al fondo de la tabla de posiciones de su grupo junto a Luxemburgo que dio la nota. Y justamente ese empate fue el que le dio la segunda alegría a Suecia que con el 4 a 0 quedó más cerca de Rusia 2018.