TURISMO CARRETERA: LA CUARTA DE MINERVINO EN EL GÁLVEZ

Un 30 de julio de 1995, Luis Minervino se quedaba con la victoria en la final del Turismo Carretera en el autódromo de Buenos Aires, siendo su 4° triunfo (en ese momento) en el “Coliseo Porteño. Segundo arribó Juan María Traverso y tercero Emilio Satriano en un contundente 1-2-3 de Chevrolet.

El TC arrancaba a transitar la segunda mitad de año, en un certamen que tenía como punto de discusión el reglamento técnico. El sábado, Minervino se quedaba con la pole position con un tiempo de 1:43.344 sacándole 6 décimas a su escolta.

Ya el domingo ante 15mil personas y con un cielo seminublado, se disputaron las series por la mañana. Siendo triunfadores Minervino (ganó el parcial más veloz), Satriano y Roberto Urretavizcaya. Pasado el mediodía, llegó el momento de la final donde “Patita” no dejó dudas y rápidamente tomó el mando. por detrá se encolumnaron Urretavizcaya, Traverso, Satriano y Eduardo Ramos.

La Chevy del piloto de Chacabuco imponía un ritmo más que veloz y se escapaba de sus perseguidores. Traverso se transformaba en el nuevo segundo tras dejar atrás al Ford N°10 que también perdía con Satriano el tercer lugar.

Las deserciones estaban a la orden del día. Omar Martínez con un despiste en la horquilla, Eduardo Ramos con problemas en su Ford y José Ciantini entre otros, decían adiós antes de las primeras diez vueltas.

Promediando la competencia, las posiciones estaban establecidas sin lucha entre sí. Y cuando todo estaba tranquilo, el líder del campeonato Urretavizcaya debía abandonar por la rotura del motor de su Falcon.

Adelante “La Diabla de Chacabuco” desfilaba por la cinta asfáltica porteña y en el giro 21 recibió la bandera cuadros antes que nadie (y con una diferencia superior a los 2.5´´), para decretar la victoria de Luis Minervino con la Chevy N°8.

“La de hoy fue una victoria importante, no quise decir nada antes pero quería ganar para dedicarle el triunfo a la memoria de Juan Manuel Fangio. El auto anduvo una barbaridad, el motor tenía un poco mas de aceleración y ahí estuvo la clave».

«La victoria la merece más que nadie mi equipo. Lograron una muy buena puesta a punto, este circuito nos cae bien. Creo que será difícil volver a tener un auto tan rendidor como este fin de semana, era perfecto”, expresaba por entonces un feliz “Patita”. Que lograba su cuarto éxito en Buenos Aires y se transformaba en el nuevo puntero del certamen con 144 unidades.

Juan María Traverso culminó segundo y reponiéndose de un difícil fin de semana por la rotura de dos plantas impulsoras. Mientras que Emilio Satriano completó el podio 100% Chevrolet, para alegría de la hinchada que invadió la pista aun con los autos en carrera.

El mejor Ford fue el de Vicente Pernía que concluyó cuarto en tanto que el Dodge más adelantado le perteneció a Nelson Oñatibia que se ubicó 15. Torino no tuvo ningún representante en la final.

Posteriormente el Turismo Carretera puso rumbo a Rafaela para la disputa de las 200 Millas Rafaelinas.