Su caso no es único y de hecho ejemplos hay de sobra. Al igual que Huracán de Tres Arroyos o Gimnasia y Tiro de Salta, le llegó el turno del ocaso a Tiro Federal de Rosario. Una serie de resultados adversos dejó al Tigre del Barrio Ludueña sin los flashes siquiera del Argentino A y, a partir del 2016, deberá disputar el extenso campeonato del Federal B.
El descenso fue la crónica de una muerte anunciada. Las diez plazas que durante el torneo de transición ofrecieron para subir al Nacional B fueron la manzana de la tentación para este club oriundo de la cuna de la bandera. La apuesta en su momento fue volver a la segunda categoría pero el resultado no se logró. Por ende la dirigencia optó por reducir costos para la temporada 2015 sabiendo que el desenlace podía ser el que finalmente terminó siendo.
Desde el arranque se sabía que no sería el año de Tiro Federal. Una goleada en casa frente a Las Parejas y luego otro abultado marcador contra Defensores de Villa Ramallo dejaron en claro que las desazones iban a ser más que las alegrías para el plantel que actualmente conduce Fabio Pérez. Y la racha adversa continuó a lo largo del certamen a pesar de contar con jugadores de renombre como Diego Chitzoff o la vieja promesa, Leandro Depetris. Incluso, a pesar de la levantada sobre el final, no hubo forma de evitar la pérdida de la categoría.
El Tigre de Barrio Ludueña es el mismo que diez años atrás estaba jugando en la Primera División, aquél equipo que supo arruinarle un campeonato a Gimnasia y Esgrima La Plata, el que en su única experiencia en la A tuvo al «Cachorro» Cámpora, goleador del Apertura 2005. Una década después las luces no son las mismas para la escuadra rosarina que en septiembre, y tras caer ante Alvarado, consumó un nuevo descenso.
Tiro Federal bajó al Federal B, la cuarta categoría del fútbol argentino inidrectamente afiliada a AFA. Diez años después, quién puede volver atrás…
