Jorge Almirón tomó la decisión de no hablar con la prensa tras la derrota por 1-0 de Boca sobre Sarmiento en Junín.
Los futbolistas y el cuerpo técnico salieron del vestuario y se dirigieron directo al micro sin omitir una palabra con los periodistas presentes en el estadio Eva Perón. Pasaron uno atrás del otro y demostraron el cambio de chip urgente pensando en el duelo de Copa Libertadores del miércoles ante Racing en el Cilindro de Avellaneda.
El Xeneize regresará a los entrenamientos en la jornada de lunes, que servirá para empezar a pensar el equipo que buscará la clasificación a las semifinales de la copa internacional. Almirón decidió no hablar al igual que los jugadores y mostraron su mente puesta en la Libertadores.