Cowboys y Leones no se sacaron ventaja en el Toyota Stadium de Texas. Un tiempo para cada uno, y la tranquilidad de sentirse por ahora dentro de la zona de playoffs, generó un partido pálido, con pocas emociones y, claramente, con un 0 a 0 que pronto buscarán olvidar los de Luchi González y los de Óscar Pareja.
Dallas buscó adueñarse del pleito desde el vamos pero se topó con un fenomenal Pedro Gallese. A los 9 minutos, el arquero del Orlando City, le tapó un misíl a Harold Mosquera en una posición muy buena del delantero colombiano. No obstante, fue el peruano quién ganó el duelo de sudamericanos cuando todo comenzaba en el sur de los Estados Unidos.
El Toro manejaba las acciones y los avances. Michael Barrios, otro cafetero, probó de media distancia y los Leones se salvaron porque el disparo, que se fue por línea de fondo, había agarrado a contrapierna al histórico portero. Sobre el epílogo del capítulo inicial, Fabrice-Jean Picault ensayó una especie de chilena que se le cerraba al arquero visitante hasta que aparecieron los guantes junto al travesaño para mandarla al córner. De hecho, de ese tiro de esquina, el dueño de casa también avisó con un lindo cabezazo de Matt Hedges que despintó el larguero.
Orlando City no la pasaba bien en Texas pero, antes de irse al descanso, le iba a dar flor de susto a Dallas. Porque de no molestar al rival, el equipo de Pareja se perdió inexplicablemente la apertura del tanteador cuando ni Tesho Akindele, ni Chris Mueller, pudieron soplarla abajo de un arco completamente desguarnecido.
La complementaria cambió de protagonistas. Los púrpuras de La Florida tomaron el control del pleito, amenazaron con dos bombazos a distancia del portugués Nani, y ni siquiera se replegaron cuando a más de 20 minutos para el final, se fue expulsado Jhegson Méndez. La más clara para los Leones se dio cuando iban 34, en un contragolpe que Júnior Urso recibió por derecha, sin marcas, castigó con firmeza, pero encontró el manotazo de Jimmy Maurer contra el césped para modificar la trayectoria del esférico.
Al igual que en el capítulo inicial, la última situación para destacar le correspondió a quien no tenía la pelota. Y en este caso fueron los Cowboys quienes pudieron llevarse la victoria cuando Barrios fusiló desde la medialuna con un sablazo que tenía destino de red hasta que apareció la inmensidad del ex Racing, Rodrigo Schlegel, que le puso el cuerpo al balazo para evitar la caída de su equipo.
Hubo buenas intenciones pero faltó algo de pimienta en ofensiva. Tal vez guardaron cartuchos para más adelante, cuando el calendario y las obligaciones sean otras. Lo cierto es que en una contienda «Pareja», los de La Florida empataron con la escuadra de Luchi González. Y eso fue lo que dejó este 0 a 0 entre Dallas y Orlando.