Comunicaciones tuvo al Mariano Martínez del fútbol en su forma lúcida para activar a su equipo que no ganaba hace seis encuentros. El cartero venció por 1 a 0 a Deportivo Merlo con una gran actuación del delantero que no convirtió pero fue fundamental para alcanzar el triunfo en el Alfredo Ramos. La pelota no fue bien tratada pero el local metió la que generó y se llevó los tres puntos que lo mantienen con expectativas de alejarse de la zona roja del descenso de la B Metropolitana.
Un espanto fue el primer tiempo. Ni el amarillo ni el charro se dieron maña para hilvanar tres pases seguidos y chocaron más en la mitad de la cancha que de lo que jugaron. Flojo y para el olvido. Todos los intentos quedaron desactivados, no salió ni una idea. Sin embargo, sobre el final de la etapa inicial, un córner para el dueño de casa cayó al primer palo del arco de Llinás, Ibañez la peinó y Banegas la empujó con su cabeza por el segundo poste. Desahogo tremendo para los hinchas locales que no gritaban un gol en su hogar hacia cuatro fechas. Linda forma de irse al descenso: poco fútbol pero con una diferencia mínima.
Las obligaciones de Deportivo Merlo le pesaron demasiado. El charro nunca se convenció de empatar el encuentro y por eso las llegadas no aparecieron. Otarola descansó bajo los tres palos y volvieron a mostrar un espectáculo espantoso. Los problemas para definir de la visita y la poca efectividad en las contras dejaron en claro las posiciones de ambos equipos en la categoría. Comu no supo liquidarlo aunque terminó aguantando la pelota en su poder para dejar pasar los minutos con un Mariano Martínez en su mejor nivel y festejar un triunfo que se le negaba hace rato.
Los dos pelean en los puestos de abajo de los promedios pero Comunicaciones se dio el gusto después de seis fechas y se sacó la espina ante su gente y ante un pobre charro, que dejó dudas por doquier. La figura fue Mariano Martínez que, esta vez, no se dedicó a actuar en la novela Esperanza Mía sino que decidió jugar al fútbol y colaborar con la victoria cartera y con la esperanza por sacar a amarillo y negro del fondo.