Con muchos errores no forzados y un importante déficit con el servicio, la rosarina Nadia Podoroska quedó eliminada en la 1ª ronda del WTA 1000 de Roma. En la continuidad de un partido suspendido el miércoles por la lluvia, la rosarina cayó por 6-4 y 6-3 ante la española Sara Sorribes Tormo.
La regularidad es una materia pendiente para Nadia Podoroska en esta temporada. La santafesina arrancó el año con cuatro caídas en primera ronda, solo pudo avanzar una instancia en el Abierto de Australia al ganarle a la eslovaca Tamara Zidansek en el estreno. Durante la gira norteamericana, tuvo un paso positivo por Indian Wells, Miami y San Luis Potosí, ganando allí el segundo WTA 125 de su carrera, pero luego fueron todas derrotas, con excepción del muy buen triunfo frente Katerina Siniakova en Madrid.
La española Sara Sorribes Tormo fue la adversaria de la Peque por la ronda inicial en el Foro Itálico. El encuentro arrancó ayer con un desarrollo favorable para la argentina que se puso 3-1 arriba, pero la lluvia obligó a la suspensión. En la reanudación de este jueves, la tenista ibérica estuvo más sólida, capitalizó una doble falta de su rival para emparejar el marcador y, tras un nuevo quiebre, se llevó el parcial por 6-4.
Cuatro rompimientos consecutivos tuvieron lugar en el amanecer de la segunda manga. Ambas jugadoras lograron conservar el servicio en el meridiano del parcial, sin embargo, en la recta final, Nadia Podoroska volvió a encadenar errores, perdió una vez más el servicio con una derecha larga y se despidió del WTA 1000 de Roma al caer por 6-3 en dos horas de juego.
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