Había pasado el miércoles en el partido entre Alavés y Real Sociedad. Allí, un puñado de hinchas, silbó durante el momento de homenaje al Papa Francisco. Ahora, en Pamplona, los fanáticos de los Rojillos aprovecharon el minuto de silencio para seguir cantando. Otra parte del estadio reprobó lo sucedido entre Osasuna y Sevilla.
No sucedió en Parque Patricios. El pueblo de Huracán, eterno rival del San Lorenzo por el cual fanatizaba el Sumo Pontífice, respetó el minuto de silencio el miércoles a la noche por Copa Sudamericana. Sin embargo, en España, hubo algo que no le habrá sentado bien por parte de Jorge Mario Bergoglio.
Lo que pasó en Mendizorroza, se repitió en El Sadar. Los pitidos fueron de los hinchas del Alavés el miércoles. Ahora, antes que inicie el juego entre Osasuna y Sevilla, los locales decidieron seguir cantando más fuerte para tpar lo que debía ser un respetuoso minuto de silencio.
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