Temperley superó por la mínima a Santamarina en Tandil, logró su segunda victoria consecutiva y al fin logró triunfar como visitante en el torneo. El Celeste fue en líneas generales superior durante todo el partido, logrando consumar la diferencia con otro gol del picante Ramiro Costa, quien tuvo varias para liquidarlo. El Aurinegro jugó mal y prácticamente no generó riesgo, sin embargo terminó perdiendo una opción increíble en el minuto 94.
El Estadio Municipal General San Martín de Tandil sirvió de escenario para que el Club y Biblioteca Ramón Santamarina reciba al Club Atlético Temperley por la séptima jornada de la Primera B Nacional. El Aurinegro, dirigido por Guillermo Pereyra, llegaba de lograr en Córdoba su primera victoria de la temporada ante Instituto. En tanto el Celeste, dirigido por Cristian Aldirico, también había podido consumar frente a Gimnasia de Jujuy su tan buscado primer triunfo.
La primera mitad arrancó movida para el Gasolero, de inmediato Leonardo Di Lorenzo ubicó desde la izquierda a Ramiro Costa y el atacante quedó realmente cerca de romper el cero con su incómodo cabezazo. Enseguida Tomás Albarracín debió dejar la cancha, Cristian Paz lo reemplazó quemando la primera variante en apenas cuatro minutos.
Santamarina no encontraba su mejor versión, los atacantes no conectaban y apenas generó peligro con un centro-shot de Francisco González Metilli. Temperley se mostraba más seguro en ofensiva, y empujando encontró la opción de abrir el score en 25 minutos. Leandro González sacó el centro a la carrera desde el sector izquierdo, Nicolás Demartini intentó bajarla en segunda acción y el defensor Franco Gorzelewski terminó golpeando a Federico Manzur en su intento de tomar el balón; el juez Lucas Comesaña, en buena ubicación, no dudó en sancionar penal para el Celeste.
Ramiro Costa cobró la factura con un hermoso zurdazo a pie abierto que explotó contra el ángulo superior derecho de Nicolás Rodríguez, ganaba Temperley con el segundo gol consecutivo del delantero. El Gasolero creció en ventaja, manejó mejor la pelota e incluso pudo estirar con otro intento del propio Costa. Santamarina siguió sin brújula, aunque tuvo su bala de plata antes del descanso con el intento de Maximiliano Osurak.
Ya en el complemento el trámite no cambió demasiado aunque una jugada puntual empezó a definir el rumbo del match; antes del minuto diez Leonardo Morales evitó con infracción desde atrás la volada de Leandro González, el juez Comesaña mostró segunda amarilla al defensor expulsándolo. De esta forma Santamarina jugó más de media hora con diez, Pereyra liquidó las variantes antes del minuto veinte pero el Aurinegro jamás le encontró la vuelta.
Temperley manejó mejor los espacios y tuvo dos opciones clarísimas para liquidarlo, ambas en pies de su carta ofensiva Ramiro Costa. En la primera el rosarino lo erró de forma increíble con el arco a su merced, mientras que en la segunda el mérito fue del golero Nicolás Rodríguez y su buena reacción.
Santamarina no había logrado ninguna acción para poner en jaque la portería visitante, sin embargo durante el cuarto y último minuto adicionado Cristian Baez dejó corto el pase para su arquero y Emiliano Bogado robó yéndose de cara a gol; el volante encaró a Matías Fidel Castro en puertas del área grande pero terminó estirando el balón facilitándole las cosas al uno uruguayo. Insólita maniobra, pitazo final y triunfazo Celeste.