El Ejército de Tartán se recuperó de la paliza que le había propinado Kazajistán en la fecha inicial de las eliminatorias para la Eurocopa 2020 y derrotó por 2 a 0 a la Sereníssima en Serravalle. Los dirigidos por Alex Mc Leish, que ya había conseguido el ascenso a la segunda categoría en la Liga de Naciones de UEFA, tuvo mucho trabajo frente a un rival que no estuvo tan lejos del batacazo.
La línea de cinco defensores de San Marino invitaba a su rival a volcarse con muchos jugadores en ofensiva. Y si bien fueron los británicos quienes contaron con las chances netas de golear, también fue Escocia quien se sorprendió con algunos avances del dueño de casa que amenazó con dar la nota.
Kenny McLean avisó ni bien empezó el juego con un remate de lleno que le sacó astillas al travesaño. Sin embargo, el ex Norwich City, tuvo rápida revancha. Iban 3 minutos del primer tiempo cuando llegó una severa desatención del fondo local. Michele Cevoli dejó salir por línea de fondo una pelota que debía ser despejada y así los de Mc Leish tuvieron un córner en su favor. De ese tiro de esquina llegó el cabezazo del número ocho visitante que ubicó la pelota contra la base del poste derecho del arco de la Sereníssima y abrió la cuenta.
Con el 1 a 0 desde tan temprano, Escocia creyó que la noche rodeada de territorio italiano acabaría en goleada para celebrar con whisky. Más aún cuando Stuart Armstrong fusiló a Elia Benedettini. El arquero de San Marino dio rebote y nuevamente el otrora Celtic castigó contra la meta para que aparezcan nuevamente los guantes del guardameta local en otra salvada providencial.
Inexplicablemente, la visita avanzaba pero no profundizaba. Le faltaba esa puntada final y fue La Sereníssima quien aprovechó una serie de contragolpes para ponerle pimienta a la noche de Serravalle. Filippo Berardi lanzó un pase en cortada para el argentino Adolfo Hirsch quien logró esquivar a Scott Bain y sacar un remate que dio en la parte externa de la red. Rápidamente el dueño de casa volvió a avisar con un buen intento de Mirko Palazzi que se fue realmente cerca del palo izquierdo de la cueva del Ejército de Tartán.
Los de Franco Varrella no tuvieron mucho que hacer en la complementaria ya que los británticos se agruparon mejor, evitaron los sofocones, y poco antes de la media hora final le bajaron la persiana a la contienda con un golazo de Johnny Russell quien desparramó a Benedettini por el área y le rompió el arco al anfitrión. El hielo ya estaba en el vaso, faltaba el scotch nomás pero antes que se sirva una medida doble, los de Mc Leish se atragantaron con un par de definiciones defectuosas de Marc Mc Nulty.
San Marino dejó una imagen formidable a pesar de la derrota frente a una de las selecciones con mayor historia en el mundo. Escocia arrancó con todo pero no pudo golear como otros combinados a quien marcha en el último lugar del grupo I que lidera Bélgica. Más allá de eso, el 2 a 0, le sirvió para olvidar el mal trago de la derrota ante Kazajistán y para servirse otro vaso de buen whisky en su salud.