Cerrando la ventana de julio con su mejor producción, Los Pumas vencieron 33-11 a Gales, actual campeón del Seis Naciones, en el Principality Stadium de Cardiff. De esta forma, la Selección Argentina concluye la gira por el Viejo Continente de forma invicta y con un rendimiento que fue de menor a mayor.
No fue una actuación brillante del equipo dirigido por Mario Ladesma, ni cerca estuvo de serlo, sin embargo, Argentina ganó merecidamente el encuentro y la diferencia existente en el resultado también se vio reflejada en el desarrollo del partido. La progresión de Los Pumas en la serie de partidos disputados ante Rumania, donde se ganó pero jugando mal, y luego, los dos test matches contra Gales, deja buenas sensaciones de cara al Rugby Championship, próximo objetivo del combinado albiceleste.
Los galeses se ordenaron mejor en el arranque y el partido se abrió con un try de Owen Lane tras una gran jugada colectiva que finalizó con el wing por el carril derecho apoyando contra la bandera, pero enseguida vino la respuesta de Los Pumas con otra maniobra de gran factura que terminó con Matías Moroni dentro del ingoal galés para festejar el medio centenar de partidos vistiendo la camiseta del seleccionado.
Argentina comenzó a crecer, con un buen trabajo del pack e imponiéndose en el contacto. Un penal de Nicolás Sánchez puso el score 10-5 y, luego, a través de un scrum dominante, Matías Moroni se desprendió a pura potencia y Tomás Cubelli apoyó el segundo try albiceleste del encuentro con el cual se fueron al entretiempo en ventaja por 17-8.

No fue auspicioso el arranque de Los Pumas en la segunda mitad, tanto errores en el manejo como en la toma de decisiones sumado a una merma respecto a la intensidad con que habían jugado antes de irse al descanso, entonces el protagonismo cambió de lado, campo y pelota eran del equipo del Dragón que descontó con el acierto de Jarrod Evans a los palos.
Con Rodrigo Bruni como estandarte, aún con fallas y algunas desatenciones, los dirigidos por el “Bocha” Ledesma recuperaron el protagonismo, la amarilla a Hallam Amos dejó a los británicos con uno menos por diez minutos y Argentina sacó dividendos de la situación con tres penales convertidos por el Nicolás Sánchez, que se reencontró con los palos, amplió la diferencia a 26-11.

En el epílogo, el try de Pablo Matera abrazado a la guinda debajo de la hache y la conversión del apertura tucumano pusieron cifras definitivas a la contienda, sentenciando el séptimo triunfo de la historia frente a Gales y cerrar la gira de mejor forma de cara al Rugby Championship que comenzará para los argentinos el 14 de agosto visitando a los Springboks.