A River le costó mucho más de lo pensado el partido por 16avos. de Copa Argentina ante Sportivo Estudiantes de San Luis y si bien se llevó la victoria por 2-1, sobre el final del partido sintió el rigor y se salvó por un error.
El partido arrancó ampliamente a favor del Millonario ya que con presión y manejo de la pelota, no dejaba participar al conjunto puntano y es por eso que hizo partícipe a Brasca de varias atajadas, menores, pero que podrían haber significado la apertura del marcador. Sin embargo en la acción más fácil para el arquero, la pelota le jugó una mala pasada y tras un remate de Ignacio Fernández, se le escabulló por debajo de los brazos y terminó entrando. El equipo de Gallardo siguió buscando, pero no pudo ampliar la diferencia y con ese resultado, terminó el primer tiempo.
Ya en el complemento los de Núñez sufrieron la baja de uno de los jugadores más movedizos del mediocampo, Tomás Andrade quien tuvo que ser reemplazado por un fuerte dolor en su rodilla y las cosas se complicaron más para llegar al arco rival y ésto fue aprovechado por los dirigidos por Rambert. Cuando el Millo parecía tener el partido controlado, una pelota quedó boyando y tras una mala salida de Batalla, Mosset la mandó al fondo de la red para asustar a todo el equipo del Muñeco.
La salvación llegó desde un error, ya que a Gonzalo Martínez le quedó un tiro libre apenas a metros del vértice del área y queriendo tirar un centro, terminó colando la pelota a espaldas de Brasca, quien nada pudo hacer. Finalmente el equipo de Primera División fue el vencedor, por poco, para clasificarse a octavos de final, donde deberá esperar su rival que saldrá el miércoles del duelo entre Arsenal de Sarandí y Defensores de Belgrano.