La Academia levantó el Trofeo de Verano que esta vez se disputó más cerca de la cordillera que del mar. Tras empatar 2 a 2 en los 90 minutos reglamentarios ante el Furacao, apareció la enormidad de Javier García quien fue clave en la tanda de penales para que los argentinos se impusieran por 5 a 4 desde los doce pasos finalmente.
Intenso. Como Sebastián Beccacece que en los dos amistosos que tuvo al frente de Racing pudo meter su mano y su impronta. Así fue el encuentro que el último campeón de la Superliga mantuvo con Atlético Paranaense en el Estadio Bicentenario de la provincia de San Juan y que le sirvió a ambos como preparativo para lo que será la Copa Libertadores 2020.
A los 3 minutos del primer tiempo, Santos, el guardameta nacido en Campiña Grande, dejó corto un despeje y se la sirvió nada más y nada menos que al experimentado Lisandro López. El «Licha», viendo la cueva desguarnecida, le pegó con clase buscando la ratonera más lejana del arquero brasilero pero el palo derecho le negó el tanto. Quien sí estuvo atento fue Matías Rojas al capturar el rebote y mandarla al fondo mostrando que los dos goles convertidos en el último partido del 2019 le devolvieron la confianzan al ex Defensa y Justicia.
La alegría para Racing duró poco. En el costado opuesto de la gramilla, Carlos Eduardo exigió a Gabriel Arias quien contra su parante zurdo contuvo a medias el zapatazo esquinado. Guilherme Bissoli, surgido de la cantera del San Pablo, emuló al paraguayo y sólo tuvo que empujar la redonda para estampar el 1 a 1 en el Bicentenario de San Juan.
Atlético Paranaense parecía más firme que los de Avellaneda. Encontrar rápidamente la parda les dio oxígeno y potencial para seguir generando riesgo contra el arco de quien supo custodiar los tres palos de la Selección de Chile. Los del país vecino ganaban en las alturas, por las bandas, y la más clara para ponerse en ventaja fue un cabezazo de Lucas Halter que se perdió milimétricamente por línea de fondo.
Los dirigidos por Beccacece lograron apagar el fuego rival gracias a otra salida en falso del Furacao. Allí, Héctor Fértoli, se estrenó con la pilcha celeste y blanca sacando un remate cruzado que se escondió contra la ratonera izquierda de Santos. La Academia pasaba a estar arriba otra vez y, cual una fotocopia, su felicidad duró apenas un parpadeo ya que antes de la media hora, Marquinhos Gabriel colgó un tiro libre del vértice superior derecho de Arias para clavar el 2 a 2 que acompañó a ambos hasta el final del cotejo.
Una lluvia de cambios hizo que la complementaria fuese otro partido, con nuevos protagonistas pero tan intenso como los 45 minutos iniciales. Darío Cvitanich estuvo cerca de anotar para los argentinos con una obra de arte pero al ex Banfield le faltó algo de fortuna. Nikao, para los brasileros, falló una especie de tijera que tenía destino de red. El ida y vuelta era interesante pero el reloj consumió las esperanzas y todo se dirimió desde los doce pasos en una definición no apta para cardíacos.
Empezó pateando un infalible como Cvitanich pero Santos adivinó la intención, voló hacia su derecha, y desvió el zapatazo. García también leyó la mente de Nikao pero el de Montes Claros la guardó donde solo llegan las arañas. Así los de Eduardo Barros ganaban 1 a 0 en la serie de cinco que continuó con el empate de Leonel Miranda y con la excelente atajada del ex Boca y Tigre al tiro de Luis González.
Con la definición empatada en uno, la Academia quedó al borde del nocáut. Santos le frenó el balazo de Mauricio Martínez, y el ex hombre del fútbol de Bélgica, Fernando Canesín, se las arregló para poner arriba al Furacao por 2 a 1. El «Rayo» Fértoli de gran partido le pifió al arco y todo estaba a pedir del elenco rojinegro. Sin embargo Khellven emuló al ex Newell´s y desvió su intento.
Walter Montoya marcó el 2 a 2 pero faltaba que García hiciera magia para que los de Beccacece siguiense con vida en San Juan. Y así fue con el arquero suplente del elenco de Avellaneda se reclinó hacia su derecha para ahogarle el festejo al histórico Adriano que supo brillar en el Sevilla y en el Barcelona.
La serie de uno volvió a ser una pesadilla para la Academia. Alexis Soto peinó el travesaño y el final volvía a estar cerca para el bicampeón argentino del 2019. Pero García volvió a viajar hacia su diestra para detener la masita de Leo Cittadini que quiso guardarle contra un rincón.
Sin embargo, Nicolás Reneiro, Iván Pillud y Thiago Banega no fallaron más, Lucas Halter y Vitinho hicieron lo propio para los brasileros, y en el decimoctavo disparo de la noche, el arquero de Racing brilló nuevamente para quedarse con el zapatazo de Breno Oliveira. Así, tras el 2 a 2 ante Atlético Paranaense, los de Beccacece festejaron el 5 a 4 en los penales gracias a García.