Parma se recuperó de una desventaja de dos goles contra Lecce y empató un partido increíble con dos tantos en el tiempo de descuento para salvar una unidad fuera de casa.
Primer tiempo con el gol de Dorgu para el Lecce
Lecce y Parma protagonizaron un primer tiempo sin muchos sobresaltos y con pocas emociones. El local fue el único que supo identificar el momento clave para lastimar a su rival en una jugada diseñada por Ylber Ramadani y ejecutada por Patrick Dorgu que rompió el cero en el Stadio Ettore Giardiniero para irse con la ventaja al entretiempo.
Un movido complemento con expulsiones y la sentencia del Lecce
El partido se le complicó al conjunto de Luca Gotti con la temprana expulsión de Frederic Guilbert por una pelea en el campo de juego. El Parma no aprovechó el momento de superioridad numérica y encima sufrió la expulsión directa de Matteo Cancellieri por una fuerte entrada. De ese mismo tiro libre de la roja, Nikola Krstovic fusiló a Zion Suzuki y se benefició de un rebote para anotar el 2-0.
Parma no se rindió, ganó confianza con los cambios y consiguió el descuento en el cuarto minuto adicional a través de Pontus Almqvist para generar la ilusión en los últimos minutos. Nada estuvo perdido para la visita que, dos minutos después, logró lo que parecía imposible: el empate gracias a una gran aparición de Antoine Hainaut.
El equipo Gialloblù alcanzó una igualdad imposible en un partido frenético con expulsiones y grandes emociones en un tremendo segundo tiempo.
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