Los Diablos Rojos lograron estar dos goles de ventaja en un par de oportunidades distintas, sin embargo no pudieron sostenerse y Galatasaray sumó un valioso punto que lo mantiene en zona de clasificación. Tremendo error de André Onana para el 3-2 parcial.
Manchester United fue una montaña rusa de emociones en su visita a Estambul, partido condicionado por la tremenda tormenta que cayó sobre la ciudad turca.
Galatasaray comenzó el partido con aires de protagonismo pero rápidamente el United quebró el cero con gran pase de Bruno para la aparición de Alejandro Garnacho, quien con derechazo convirtió su primer gol en Champions League.
Manchester comenzó a juntar méritos en ventaja y estiró diferencias con un espectacular gol de Bruno Fernandes, quien con tremendo derechazo desde afuera del área imprimió el 2-0 antes de los veinte minutos.
Pero Galatasaray encontró luz donde no parecía haberla. Un tiro libre frontal de Hakim Ziyech superó la barrera y encontró estático a Onana, que no atinó a reaccionar y solo vio con el balón se le metía a pocos centímetros.
El 2-1 envalentonó al conjunto turco, pero el United le daría otro cachetazo en el comienzo del complemento con otra conducción de Bruno, esta vez soltando para Aaron Wan-Bissaka y su centro bajo que Scott Mctominay cambió por gol.
El 3-1 dejaba al United en una posición verdaderamente ventajosa, pero todo cambió con otro error de André Onana.
Ziyech percibió las dudas del arquero y lo buscó con un tiro libre de costado, donde todos esperaban centro. La pelota fue al camerunés que, intentando una de vóley, terminó metiéndola contra propia puerta tras puñetazo fallido.
Insólita reacción del arquero para el doblete del ex Chelsea, complicando seriamente al United.
Para colmo y enseguida Karem Akturkoglu ganó la cuerda en le ingreso al área y sacudió de derecha ante un Onana adelantado, 3-3.
Manchester United salió con todo a buscar el triunfo y estuvo dos veces muy cerca de conseguirlo, primero con el remate largo que Bruno pegó contra el poste, y leugo con el mano a mano que Muslera le sacó a Pellistri.
Ahora Manchester United ya no depende de sí mismo para clasificarse a Octavos de Final. Debe ganarle a Bayern Múnich en la última fecha, en Old Trafford, y esperar que Galatasaray no triunfe en Dinamarca. También que Copenhague no de la sorpresa en Múnich.