Los Red Devils cayeron el domingo ante Tottenham en Old Trafford pero, más allá de la derrota, Erik ten Hag sufría por la sanción que podía caerle a su capitán de manera injusta. Bruno Fernandes no quiso cometerle infracción a James Maddison.
La expulsión sobre el portugués fue discutida y hasta el jugador de los Spurs comprendió que no ameritaba. Sin embargo, Chris Kavanagh no quiso discutir. Roja directa para el emblema de Manchester United que quedó con diez hombres en el primer tiempo.
Este martes, las autoridades de Premier League comprendieron que la decisión del colegiado fue excesiva. Por eso mismo, Erik ten Hag respira aliviado. Y Bruno Fernandes podrá estar disponible el domingo próximo en un partido trascendental ante Aston Villa.
Foto: Photo by Carl Recine/Getty Images
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