Terminó mal la tarde en Lomas de Zamora. El Milrayitas buscaba el empate a como de lugar y lo conseguía en el tercer minuto de descuento pero, después de los festejos, Ignacio Lupani anuló la conquista a instancias de su asistente, Leandro Garay. De esta manera, el Tricolor se impuso en el Eduardo Gallardón por 2 a 1 privando a los de Juan Carlos Kopriva, una vez más, de trepar a la cima del campeonato de la Primera B Metropolitana.
El partido tuvo un comienzo magistral. Deportivo Armenio pegó primero pero Los Andes supo igualarlo. Sin embargo, el elenco de José Villarreal mostró un gran potencial en el capítulo inicial para bajarle la persiana al cotejo y dejar que en la complementaria, los del «Vikingo» tomen las riendas para buscar, a como de lugar, un resultado que no sea tan adverso en su propio domicilio.
Una rápida salida del elenco de Ingeniero Maschwitz agarró mal parado al dueño de casa cuando iban 9 minutos del primer tiempo. Christian Soria, a pura velocidad, se llevó la marca, encontró adelantado a Daniel Monllor que retrocedió como pudo, pero a esa altura todo era tarde para el Milrayitas. El zapatazo seco fue a parar al fondo de las cuerdas para estampar el 1 a 0.
Los Andes movió del medio y se repuso al mal comienzo. El ex Atlético Rafaela, Dimas Morales, avanzó por el flanco izquierdo y lanzó un centro perfecto para que el eterno, Alejandro Noriega, pusiera la parda en las chapas con un certero cabezazo que se tornó inatajable para el otrora Fénix, Sebastián Hernández. Sin embargo, Deportivo Armenio tenía armas como para volver a lastimar a los de Kopriva.
Un penal a los 18 minutos del primer tiempo le permitió a Nahuel Peralta poner en ventaja otra vez a los de Villarreal en Lomas de Zamora. Con el 2 a 1, el encuentro se tornó en un partidazo ya que la visita dilapidó un par de situaciones claras para hacer mayor la diferencia mientras que, de menor a mayor, el elenco local comenzó a reaccionar para ir en búsqueda del empate que habían conseguido rápidamente tras el golpe inicial.
En la complementaria, el Milrayitas apostó ofensivamente hasta encontrar ese tanto que ansiaba. Ulises Ortegoza empujó una pelota contra la base del palo derecho de Hernández y marcó el 2 a 2 cuando iban 48 de la complementaria. Los locales festejaban a más no poder mientras Lupani y su asistente no ponían en tela de juicio la conquista. Pero, una serie de reclamos, derivó en que los jueces tomaran la decisión de anular la diana desatando la furia del todo el público en el Eduarco Gallardón.
Si hubo offside, si sucedió algo ilícito, en la rapidez de la jugada sin dudas debió ser observado con lupa. O con Lupani. Los Andes, con un cúmulo de bronca, dejó el estadio tras una derrota que lo alejó de la cima mientras que Deportivo Armenio celebró el 2 a 1 que le hizo trepar peldaños para olvidarse por un rato del puesto de descenso y poder imaginarse un futuro con otras aspiraciones.