El líder de la Premier League acarició la épica en su visita a St. James´ Park, sin embargo un error en el final le impidió seguir desfilando. Tremendo empate 3-3.
Liverpool estuvo al borde de ganar un partido muy importante, pero Newcastle le marcó la cancha hasta el final.
Las Urracas lograron la ventaja inicial con un golazo de Aleksander Isak a diez minutos del descanso, pero Liverpool recogió el guante y Salah frotó la lámpara para asistir a Curtis Jones apenas iniciado el complemento.
Liverpool intentó tomar las riendas del encuentro pero chocó contra la intensidad de un Newcastle bien planteado, que recuperó la ventaja gracias al gol de Anthony Gordon.
El 2-1 le quitaba peso a Liverpool, sin embargo una ráfaga de Mohamed Salah le permitió al egipcio anotar dos goles en plena área para remontar al 3-2.
Locura de partido en St. James´, locura de un Salah revitalizado mientras se discute su renovación en el club.
Parecía que Liverpool se quedaba con algo más de tres puntos pero a segundos de los noventa el arquero Kelleher calculó mal un centro largo y Fabian Schar aprovechó conectando al 3-3 final.
Liverpool sigue liderando la Premier, pero ahora con un poco menos de margen.
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