El conjunto amarillo de Edgaras Jankauskas se estancó sin unidades en el grupo 4 de la división C y marcha directo al descenso en la Liga de Naciones de la UEFA. Cuando todo parecía que los ex soviéticos saldría del cero en la tabla de posiciones, la Tricolorii enmudeció Vilna con un gol en el cuarto minuto de adición para que, los dirigidos por Cosmín Contra, cantasen victoria por vez primera gracias al 2 a 1 que le puso fin a un par de empates en fila.
Lituania llegaba a este cotejo tras perder con Serbia y también con Montenegro. No había hecho goles pero tampoco frente a Rumania generó mucho como para convertir. Lo cierto fue que en tiempo extra logró anotar y emparejar las acciones hasta que su rival le borró la sonrisa del rostro con un hermoso tanto del ex jugadore del Stuttgart de Alemania, Alexandru Maxim.
El juego fue de menor a mayor. En la etapa inicial Alexandru Chipciu probó a Ernestas Setkus que respondió muy bien frente a un disparo a quemarropa. La visita llegaba y no iba a tardar en abrir la cuenta ya que, antes del cuarto de hora, el ex hombre del Anderlecht de Bélgica no desaprovechó una carambola en el área grande y mandó el esférico al fondo de la red. El dueño de casa, hasta ese entonces, sufría por el potencial de su contrincante y por la mala fortuna ya que el palo izquierdo del arco defendido por el portero de la Fiorentina, Ciprian Tatarusanu, devolvió el zapatazo del capitán local, Fiodor Cernych.
El 1 a 0 con el que marcharon al descanso obligó a un replanteo por el lado de Lituania. Pasado el cuarto de hora, Jankauskas metió dos cambios ofensivos que le lavaron un poco el rostro al esquema amarillo. No obstante los remates no iban al arco y era Rumania quien reposaba con el triunfo parcial esperando que todo acabe en Vilna. Hasta que llegaron los cinco minutos finales que fueron dignos de alquilar balcones.
A los 45, el ingresado Nerijus Valskis creyó que lo más conveniente era dar un pase al costado en lugar de probar una vez más contra la retaguardia de Tatarusanu. Allí recibió el esférico Arturas Zulpa quien sacó un derechazo inatajable para poner las cosas 1 a 1. Con ese resultado ni los ex soviéticos ni los Dacios sonreírían ya que al cabo de la tercera fecha terminarían sin triunfos y peleando por el descenso. Sin emabargo, en el cuarto minuto de adición, Maxim enganchó dentro del área grande, dejó con mucha clase en el camino a Algis Jankauskas, y ubicó la bola contra el palo más lejano de Setkus que nada pudo hacer para evitar una nueva caída de su retaguardia.
Rumania se llevó tres puntos de oro para salir del pozo y del posible repechaje en el grupo 4. También el 2 a 1 le valió oro para soñar con triunfo ante Serbia en Bucarest que los deposite en puestos de ascenso a la zona dos de la Liga de Naciones de la UEFA. Lituania, en contrapartida, lo único que saboreaba era no quedar zapatera pero el árbitro no lo terminó antes y, ¡qué te recontra!, sumaron una nueva derrota.