El Celeste dominaba el partido pero no lo liquidaba en Loma Hermosa. Así fue como a diez minutos del final el Mate lo puso en aprietos llegando a un empate inmerecido que complicaba al local en los promedios. Sin embargo, logró salir del asedio con total entrega y pudo ganarlo en el epílogo con un 2 a 1 que le da aire para soñar con la permanencia en la Primera C.
Desde el arranque hubo un sólo protagonista y fue Justo José de Urquiza. Los dirigidos por Mariano de la Fuente presionaron en toda la cancha y ahogaron a Argentino de Quilmes que nunca le encontró la vuelta al cotejo. Arrinconada en defensiva, la escuadra de Oscar Santángelo falló nuevamente y a los 18 minutos Lucio Cereseto venció a Adrián Leguizamón con un gran remate tres dedos tras quedar mano a mano.
Previo al 1 a 0 hubo una ocasión clara en cada arco. La primera fue para el Mate pero, Nahuel Arias, no pudo concretar tras ganarle la posición a Mariano Díaz. En la contra pudo anotar Cereseto tras una gran asistencia de Nicolás Nóbile. Sin embargo el ex atacante del Deportivo Morón tuvo revancha raudamente para aventajar al local que luego manejó las riendas a su antojo con una gran performance de su mediocampo.
Si la tarde prometía ser beneficiosa para Jota Jota, el inicio de la complementaria le dio un guiño. Iban algunos segundos cuando Jorge Benítez se fue expulsado en la visita por una durísima entrada sobre Nóbile y así los de Santángelo debieron afrontar el partido con un resultado adverso y desventaja numérica. No obstante los goles no llegaban y Lucas Comesaña comenzaba de cargar de tarjetas amarillas al Celeste.
La expulsión de Nicolás Mamberti equiparó las acciones y, con más voluntad que fútbol, el conjunto de la barranca fue por el empate que consiguió en una serie de rebotes por intermedio de Lionel Spíonla. Lo que había edificado el dueño de casa parecía derrumbarse y el descenso a la Primera D volvía a merodear. Pero una vez más se recuperaron los dirigidos por De la Fuente y sobre el final, Matías Ostanelli derribó a Damián Bogado dentro del área. El colegiado marcó el penal y Ezequiel Bustamente se encargó de cambiar la pena máxima por el gol que hizo delirar al público local.
Justo José de Urquiza ganó 2 a 1, a pesar de que el destino quiso acorrararlos una vez más. Salvarse del descenso ya no es una utopía pero para ello deberá seguir dejando el alma tal como lo hizo durante los noventa minutos frente a Argentino de Quilmes.