El Tallarín de Cristian Aldirico rescató un punto de su visita a Loma Hermosa que le sirvió para estirar su invicto a diez partidos y alimentar aún más el sueño de volver a la Primera B Metropolitana. El Rojo, que comenzó ganando, igualó 1 a 1 frente a Jota Jota que, a pesar de la localía, disfrutó en demasía la unidad por el tenor del rival y lo que le sirve para respirar en la tabla del descenso.
Talleres justifica su liderazgo con una propuesta de juego vistosa que, si bien volvió a mostrarla fuera de casa, le costó plasmarla en el marcador. Con los laterales muy activos, el elenco de Remedios de Escalada, atacó a Justo José de Urquiza pero tardó en vulnerarlo. En sólo cuatro encuentros de los veintidós que disputó no convirtió por lo cual, un grito de la visita era probable frente a un contrincante que, asediado por los promedios, dejó la vida en cada pelota.
La única situación de riesgo que hubo en el primer tiempo fue un disparo de Lucio Ceresetto que se estrelló en el travaseño. Sin embargo el ex delantero de Newell´s Old Boys iba a seguir siendo protagonista del partido y pieza clave en el resultado final. Pero el 0 a 0 fue inamovible para sendas escuadras a la hora de irse a los vestuarios.
Pasado el cuarto de hora inicial en la segunda parte llegó el gol de Talleres que le daba tres puntos de oro para estirar la ventaja respecto a sus perseguidores, aprovechando incluso el empate que cosechaba Berazategui ante Sacachispas. Gastón Corado de cabeza vencía la resistencia de Diego Córdoba pero la felicidad para la visita no iba a perdurar demasiado.
Jota Jota llegó a la igualdad poco antes de la media hora de juego por intermedio de Ceresetto y a partir de ese entonces el tanteador no se modificó más.
Talleres sumó un punto y sigue en lo más alto del campeonato. Le quedan 16 finales para cumplir el sueño que alimenta hace rato. Justo José de Urquiza, si bien continúa sin ganar, también celebró el punto teniendo en cuenta que jugaba ante la cenicienta del campeonato.