En las últimas horas el Rojo de Avellaneda fue noticia porque un grupo de barrabravas le pidió al director técnico una suma de dinero para poder concretar el viaje de apoyo al plantel que el miércoles jugará contra Nacional de Paraguay en tierras guaraníes. Semejante episodio causó rechazó puertas adentro, cobró notoriedad en los medios y mientras los jugadores entrenan pensando en el compromiso por cuartos de final de la Copa Sudamericana, la policía custodia el predio de Villa Domínico para evitar una visita similar.
Doble paradoja tendrá Independiente en esta llave de competencia continental. SU rival es apodado la Academia pero increíblemente jugarán en un estadio llamado Arsenio Erico donde el Rey de Copas podría sentirse como en casa. Con la mente puesta en traer un buen resultado para Buenos Aires, el sábado por la mañana se jugaron dos amistosos ante Estudiantes de Buenos Aires en el Libertadores de América y en sendos cotejos hubo triunfos para los dirigidos por Ariel Holan.
En la contienda de los titulares, el Rojo se impuso por la mínima diferencia con un tanto de Ezequiel Barco. Cuando se enfrentaron los suplentes la historia fue otra puesto a que empezó ganando el Picha pero luego lo dieron vuelta con un grito de Domingo Blanco y otro del «Puma» Emmanuel Gigliotti.
Los trabajos no cesaron en el club y, a pesar de la jornada eleccionaria, el domingo también se reunieron para seguir puliendo detalles. No obstante, tras el apriete y el pedido de 50 mil dólares a Holan, esta vez la práctica fue a puertas cerradas y sin presencia de la prensa. Ante estos momentos que atraviesa Independiente, la entidad recibió el apoyo y la solidaridad de su eterno rival, Racing, así como también de Huracán y River Plate.