HURACÁN 1 – SAN LORENZO 0: PATO A LA AZULGRANA

Huracán volvió a ganar el clásico después de 5 años, e hizo delirar a todo Parque Patricios. Derrotó a San Lorenzo por 1 a 0 con el gol de Patricio Toranzo a los 26 minutos de la segunda etapa, con un magnífico tiro libre. Además, el Ciclón terminó con 9 jugadores por las expulsiones de Julio Buffarini y Matías Caruzzo.

Todo arrancó con una tonada pacífica. Los capitanes de ambos equipo plantaron el olivo de la paz. Pero poco duró ya que antes de que arranque el partido, Cristian Espinoza y Sebastián Blanco casi se van a las manos porque el 7 del local pisó y pateó un escudo del rival.

Pero el encuentro arrancó, después del tumulto, y el Globo empezó a mostrar que era más. Tenía la pelota y realizaba sus ataques por la banda de Espinoza, y era por ahí donde se originaron las mejores oportunidades. Primero fue el jugador de la selección sub 20 de Argentina quien exigió a Sebastián Torrico. Minutos más tarde, el mismo Espinoza envió un centro milimétrico, que conectó Ramón Ábila, y con una tijera sensacional, que se estrelló en el travesaño, casi abre el marcador. El Cuervo, por su parte, a penas se podía acercar al arco de Marcos Díaz, pero en la primera llegada clara, Héctor Villalba definió de zurda ante la salida de Díaz, y su remate también dio en el travesaño.

Antes del final de la primera parte, el goleador del local, Ábila, se tuvo que ir reemplazado por Iván Borghello, debido a una lesión en su pierna.

En el complemento, la cosa no cambió demasiado. Huracán  tenía la pelota y las mejores oportunidades. La defensa azulgrana estaba haciendo bien su trabajo de aguantar cada arremetida, pero el equipo no tenía la posesión y Edgardo Bauza tomó nota de esto. Por eso sacó a una referencia en el ataque como Martín Cauteruccio, y mandó a la cancha a Martín Rolle.  Justamente Rolle tuvo la más clara para el Ciclón, con un mano a mano frente a Díaz, pero no puso bien el pie, y el remate salió desviado.

Parecía que el encuentro no se iba a abrir si no era por una pelota parada, y así fue. A los 26, Toranzo ejecutó un muy buen tiro libre, que superó a la barrera y se metió al fondo del arco para poner el 1 a 0. Ya en desventaja, Bauza movió el banco, pero no encontró respuesta en el equipo. Para colmo, Buffarini (por una entrada que no ameritaba roja directa) y Caruzzo (por doble amarilla) se fueron expulsados por Sergio Pezzotta, y dejaron al Ciclón con 9. Huracán aprovechó la diferencia numérica, y movió la pelota para hacer pasar el tiempo.

En los últimos 5 minutos, los dirigidos por Eduardo Domínguez casi aumentan el marcador con otro sensacional tiro libre, esta vez de Mauro Bogado, que rompió el palo. Sin embargo, antes de que termine el partido, Mauro Matos casi empata el partido con una definición que no tuvo dirección y cruzó toda la línea de gol.

Finalmente, Pezzotta marcó el final del partido, y desató la locura en el Palacio Tomás Adolfo Ducó. Los quemeros presentes celebraron el triunfo como una fiesta cantándole a su eterno rival «Me parece que el Cuervo no sale campeón, porque el Globo lo cag*».