Ferro se hace fuerte de local y Almirante Brown fue su nueva víctima

El Verdolaga se impuso por 1-0 a La Fragata con un gol de Lautaro Gordillo y lleva ocho sin perder jugando en el Arquitecto Ricardo Etcheverri.

Era una gran chance para los dos de acercarse más al Reducido. El que ganaba se quedaba a solamente dos puntos del último que está ingresando. Y así lo jugaron. Calentaron la fría noche en el Arquitecto Ricardo Etcheverri, el escenario donde Ferro derrotó 1-0 a Almirante Brown por la vigesimonovena fecha de la Primera Nacional.

Comenzó parejo el encuentro. Con los dos equipos ordenados a la hora de defender y tratando de generar riesgo cuando tenían la pelota. La Fragata casi se pone en ventaja con un testazo de Agustín Dattola si no fuera por la volada de Marcelo Miño para salvar su valla. En cambio, en la otra área, Lautaro Gordillo consiguió conectar de cabeza y mandarla al fondo de la red para romper el cero. Y encima, cerca del final de la primera parte, el propio Gordillo controló, tuvo bastante tiempo pensar lo que iba hacer, pero no logró ponerlo en práctica y se la entregó a las manos a Ramiro Martínez.

Al estar en desventaja, la visita salió con más voracidad ofensiva. Consiguió llevar al Verdolaga a su campo. Las pulsaciones empezaron a subir y en un lapso de dos minutos terminaron quedándose con diez los dos por las expulsiones de Juan Ruiz Gómez y Facundo Miño. Desde ahí se partió el juego. El Aurinegro siguió buscando el empate y al local le quedó espacio para salir de contraataque. Y si no fuera por Martínez, la ventaja en el marcador hubiera sido mayor. Sobre el final, Oeste se quedó con nueve porque Alexis Sosa vio la roja.

Ferro se hace fuerte de local, lleva ocho sin caer jugando en casa y aún mantiene la ilusión de entrar en el Reducido. A Almirante Brown le cuesta cada vez que sale de Isidro Casanova y desperdició una buena oportunidad de meterse en la lucha.

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Nació en noviembre de 2001 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en la previa de una final intercontinental de Boca. Con la pelota bajo su brazo, transitó el camino hasta encontrar la pasión por el deporte. Aliado del teclado y de la profesión.
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