Los Toffees arrancaron ganando desde el vestuario. Literalmente, Leicester ni siquiera llegó a tocar la pelota en la tardenoche de Merseyside porque Everton movió del medio, la tocaron tres jugadores, y anotaron el 1 a 0 con un soñado gol de Abdoulaye Doucouré.
Sonó el silbato de Darren Bondo y la pelota salió del círculo central directo para su arco. Jordan Pickford metió un bombazo a campo rival y, sin pensarlo, dio una asistencia. Doucouré se hizo de la redonda a pura velocidad, pisó el área grande y definió con un derechazo.
Recién iban 10 segundos y 18 centésimas de partido. Este 1 a 0 de Everton sobre Leicester se transformó en el cuarto gol más rápido de la Premier League. El récord aún lo tiene Shane Long cuando, en abril de 2019, necesitó 7 segundos para abrir la cuenta para Southampton ante Watford.
Foto: Photo by Carl Recine/Getty Images
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