El torneo es la Copa Argentina pero de qué sirven los países si no están para hermanarse y ayudarse. En la noche de Córdoba, el Mario Alberto Kempes, se encendió con los colores de la bandera ucraniana. Así, con ese brillo, comenzó a vivirse el pleito entre Boca Juniors y Central Córdoba de Rosario.
El plantel Charrúa llegó al otrora Chateau Carreras y posó para tener una foto inolvidable. Frente a ellos, que militan en la Primera C, estará el campeón reinante de este certamen. El Xeneize, tras una semana bastante turbulenta puertas adentro, intentará dejar en camarines todos los trapos sucios y demostrar en cancha lo que son capaces de hacer.
Sin embargo, antes que suene el silbato de Jorge Baliño, las paredes del estadio rindieron homenaje al pueblo ucraniano que suplica el fin de la guerra con Rusia. El Mario Alberto Kempes se pinto de azul y amarillo, no precisamente por los colores del elenco de la riberta, sino de un pueblo que lucha y defiende lo suyo a como dé lugar.
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