Eduardo Sacheri regaló a la literatura futbolera cuentos e historias que nos llenaron el corazón y nos permitieron observar la pelota desde otros puntos de vista.
Su pasión por el fútbol lo llevó a escribir esos libros que mezclan imaginación con un poco de vivencias. «Mis experiencias no son tan interesantes a la hora de crear un cuento aunque con Independiente me tomo la libertad de ser autobiográfico», se describe el gran escritor argentino el poder de la pluma sobre el papel. En la entrevista realizada en Vermouth Deportivo Radio por AM 1400 Radio Punto (Todos los miércoles de 20 a 22 horas), el sentimiento por Independiente del autor de la historia de la exitosa película «El Secreto de sus ojos» cae enseguida a la conversación, resulta inevitable que sus palabras nos lleven directamente a Avellaneda y su comportamiento de un partido: «Independiente es un nexo con mi viejo. El fútbol genera un amor infantil y se disfruta. Voy a la cancha pero no me siento, me paro en la popular. Mi hijo insiste aunque mi cuerpo no aguante como antes. Lo que sí no hago es aplaudir burros, ese es mi límite ni tampoco te aplaudo un córner a los ponchazos. Eso sí, chiflar a los jugadores no es lo mío». Sacheri no evitó hablar del clásico rival aunque siempre con la seriedad y coherencia que caracteriza sus palabras. «Racing es el clásico que siempre quiero ganar, así de importante y así de hasta ahí. Sin embargo, las rivalidades en este deporte se han cargado de un odio que no comparto. El fanatismo ya me parece bastante excesivo. Creo que los viejos futboleros podían convivir y elogiar jugadores ajenos. Ojo, si jugaste en Racing y después vas a Independiente, y metés un gol, no te besés la camiseta».
El Deportivo Morón tiene guardado un espacio especial en el corazón de Eduardo Sacheri. Las apariciones del Gallito en sus obras de arte de papel y tinta son constantes y por eso, el licenciado de Historia no evitó sacar su sentimiento por el club y por el antiguo estadio Francisco Urbano: «Me crié en Castelar, la primera cancha que pude ir con mi viejo fue la de Deportivo Morón. Uno tiene incorporado ver ahí esa hermosa cancha que tenía el Deportivo Morón pegado a la vía por eso me da pena que se haya mudado. Eso no quita que el nuevo Francisco Urbano no sea hermoso. A mi me gustan las canchas tal como se fueron haciendo y tal como la historia las construyó».
Sus cuentos también describen una pasión por la Selección Argentina y Maradona. Las finales del Mundial Brasil 2014 y la Copa América 2015 dejaron una herida en el escritor al igual que en todos nosotros pero aún así la esperanza sigue intacta en ver al país en lo más alto del mundo: «Me parece que esta generación de jugadores todavía nos puede dar un Mundial. No soy más que un futbolero que usa la literatura para expresarse. Es claro que Messi no rinde igual en el país que en el Barcelona pero cuando no juegue más vamos a extrañarlo. No deja de ser el mejor jugador del Mundo. La comparación con Maradona no es oportuna, es ya jugó, nos dio un montón de cosas, pero no es más jugador. Lo que había dicho de un pedido porque el 22 de junio sea feriado nacional fue una exageración».