De Mataderos hacia el oeste una sola vía férrea es la que te acerca. Justamente el Sarmiento, que nada tiene que ver con el Verde más allá del nombre. No obstante, el empate 1 a 1 entre el Gallo y el Torito en un derby bastante picante, generó que el conjunto de Junín festeje ya que los de Walter Perazzo volvieron a perdonarle la vida al líder del campeonato que depende ya de sí mismo para volver a Primera.
Nueva Chicago fue una sombra de lo que supo mostrar esta temporada. Directamente en el primer tiempo no gravitó y lo poco que propuso lo hizo después de la media hora inicial. Deportivo Morón, tras la goleada sufrida en Caballito en manos de Ferrocarril Oeste, enseñó otra faceta pero no le alcanzó como para cantar victoria.
Pegó primero el dueño de casa y lastimó fuerte. Asediado por su público que llevó grandes multitudes al Nuevo Francisco Urbano, el conjunto de Alejandro Méndez y Walter Pico se puso en ventaja con un tanto de Nicolás Ramírez. Iban 10 minutos de juego cuando Maximiliano Paredes desbordó por el flanco derecho, envió el centro, Adrián González chocó con su arquero, Agustín Silva, y el esférico le quedó servido al ex Unión de Mar del Plata para estampar el 1 a 0.
La única llegada de Nueva Chicago en el primer capítulo fue un tiro libre de Arnaldo González que no contó con la magia que supo desparramar el «Pitu» en otras pelotas paradas. Así celebraba el Deportivo Morón que se iba al descanso con el triunfo entre sus manos y era más que su clásico rival en el Nuevo Francisco Urbano.
No obstante, a los 8 del segundo tiempo, el recientemente ingresado, Nicolás Franco, encontró un espacio claro en el rectángulo mayor y emparejó las acciones ubicando la pelota contra el palo más lejando de Bruno Galván. El local pudo volver a ganarlo con un disparo desviado de Gastón González y con una situación que Junior Mendieta no llegó a pellizcar.
El 1 a 1 acompañó a Deportivo Morón y a Nueva Chicago hasta que Yamil Possi marcó el final de la contienda. El derby no tuvo un ganador y, entrelíneas, pudo decirse que tuvo dos perdedores ya que el dueño de casa no logró despegarse de la zona de los promedios y la visita, una vez más, no superó la línea de Sarmiento de Junín que mira a todos desde lo más alto del campeonato.