El Manya afrontó el compromiso de segunda fase de la Copa Sudamericana masticando la bronca por no haberse metido en los octavos de la Libertadores. Así, al Carbonero le iba bien en Colombia con un tanto de Gastón Rodríguez, quien reemplazó en la etapa inicial al lesionado «Cebolla» de igual apellido, pero los Azucareros lograron empatarlo 1 a 1 sobre el final con un tanto de otro Rodríguez, Carlos Mario, alias «El Guajiro».
Los argentinos brillaron en tierras cafeteras a pesar que no anotaron. El ex Platense, Agustín Palavecino, amenazó en el arranque contra la retaguardia de Peñarol pero sus dos zapatazos desde afuera del área salieron desviados. También lo tuvo el otrora Banfield, Lucas Viatri, con un cabezazo que supo contener en varios tiempo el guardameta del Deportivo Cali, Camilo Vargas.
El cero a cero acompañó a ambos al descanso. Los uruguayos estuvieron cerca de abrir la cuenta con un lindo testazo de Walter Gargano. En el arranque de la complementaria, y por la misma vía, el canterano del Racing Club de Avellaneda, Juan Ignacio Dinenno conectó con su cráneo una pelota que dio en el palo derecho del arco defendido por Kevin Dawson.
El Rodríguez charrúa logró romper el cero pasado el cuarto de hora de la segunda parte cuando le arrebató de manera infantil una pelota a Dany Rosero Valencia, encaró hacia la meta contraria y no tuvo piedad en el mano a mano con Vargas. Pero fue el Rodríguez cafetero quien, a los 43, y tras un par de intentos fallidos de Dinenno, le rompió el arco al Manya con un verdadero zapatazo desde la medialuna que se tornó inatajable para quien era, hasta ese entonces, una de las figuras de la noche en Colombia.
Con el «Cebolla» lesionado, las estrellas terminaron siendo dos jugadores que llevaban su mismo apellido. Peñarol sonreía como visitante y soñaba con llevarse un triunfo de oro para Montevideo. Pero Deportivo Cali encontró sobre el final el 1 a 1 que le hizo sacar nuevas lágrimas al cuadro Carbonero.
