En el Juan Pasquale se abrió el torneo de la Primera Nacional para el Dragón y el Gasolero. La apertura del marcador estuvo a cargo de una tijera estupenda de Luis López para la visita y empató Nicolás Benegas para el local. Justo reparto de unidades.
La expectativa era fuerte en el Bajo Núñez porque la última campaña estuvo en las puertas de la definición (cayó en semifinales ante Instituto) y la llegada de un cuerpo técnico nuevo renueva todo. Temperley apostó a la continuidad de Bianco pero buena renovación en todos los sectores con apellidos interesantes. El primer tiempo fue monótono y de imprecisiones varias. Costó que lleguen a los arcos con peligro sacando un mano a mano de Ezequiel Aguirre que tapó bien el arquero gasolero, Matías Fidel Castro.
El complemento fue más emotivo porque Temperley se animó a profundizar más con las buenas herramientas que tenía en ataque pero la cuestión la destrabó con una joya de fin de año. Luis López levantó la cabeza, golpe de vista y sacó una tijera de mitad de cancha para dejar en ridículo al arquero Petruchi. Se comenzó a venir el Dragón y fue en los pies del Tanque Benegas que sacó un sablazo de media distancia para el 1-1 final. Ambos dispusieron de oportunidades para quedarse con los tres puntos pero fallaron la definición.