La noche en Beijing empezó a caer y justo a las estrellas aparecieron los locales emocionados por tener a uno de los mejores jugadores de fútbol del mundo en su suelo. Con el sol yéndose a la otra parte del globo terráqueo, las camisetas de la Albiceleste se multiplicaban en el estadio y la gran mayoría tenía el 10 en la espalda.
Messi ha sido furor en cualquier latitud y longitud aunque, en este caso en particular, rompió con todos los esquemas en un país como China con poca tradición futbolera pero gran aceptación de este deporte y sus verdaderas figuras.
Desde que el rosarino llegó al aeropuerto, una marea de asiáticos se volcó para tener una fotografía de cerca. Lo mismo sucedió en el lobby del hotel. Y hasta causó sorpresa de Alejandro Garnacho cuando vio la fiesta que se armaba en las calles al paso del bus de la Selección Argentina.
Ya en el estadio no faltaron las camisetas de Barcelona con el apellido de la «Pulga». Sin embargo lo que más abundaron fueron las actuales de la Albiceleste con el 10 en la espalda. Y hasta carteles declarándole todo el amor al ex PSG. La Messi Manía se ha instalado en Beijing.
Foto: Photo by Lintao Zhang/Getty Images