El Funebrero le ganó 1 a 0 a Atlético Párana y respira. El gol de Facundo Melivilo le permitió obtener un gran triunfo y salir de la zona de descenso. Achucarro en el final se perdió un gol increíble.
Le cuesta pero los consigue. Sufre pero termina con una sonrisa. De esta manera, vive su presente Chacarita, ya que las victorias que consiguió fueron trabajosas y duras. Esta vez, volvió a ganar de local por la mínima ante el conjunto entrerriano. El conjunto de San Martín ahora respira ya que se alejo de los puestos de descenso, sin embargo, no debe de confiarse.
El encuentro fue parejo en la primera parte. Si bien, el Funebrero tuvo el dominio de la pelota, esto no fue suficiente para crear situaciones de gol ya que le faltó profundidad. Tampoco sufrió muchos sobresaltos, a causa de que el rival no lo inquietó demasiado porque se dedicó a tirar centros para sus delanteros.
A partir de la segunda mitad, el partido se hizo más dinámico. Apenas iniciado el complemento, los dirigidos por Fernando Gamboa salieron más despiertos y a los 2´, Facundo Melivilo aprovechó un rebote de Arce tras un buen remate de Rodrigo Aliendro desde la derecha y abrió el marcador. Ante la victoria por la mínima, el Tricolor se encargó de defender con «uñas y dientes» el resultado, por eso apostó a la contra. Los de Edgardo Cervilla fueron en busca del empate pero con más empuje que con fútbol. En el final, cuando todo era nerviosismo e incertidumbre, Jorge Achucarro le robó la pelota al arquero Arce y se fue solo hasta el arco, que estaba completamente vacío, para poner el 2-0, pero insólitamente la tiró afuera y nadie en la cancha lo podía creer. Tuvo la suerte que Párana no concretó el empate sino hubiese pagado caro ese error.
Con este triunfo, el Funebrero consigue alejarse unos puestos de la zona de descenso, pero no debe confiarse, ya que ahora enfrentará a Guarani.