Con un equipo repleto de jugadores provenientes de las inferiores, el Funebrero igualó 0 a 0 ante el Fogonero y desperdició la chance de volver a sumar de a tres en casa. Alejado de los primeros puestos, el sueño del ascenso se complica cada vez más.
«Vamos, vamos los pibes». Con este cántico, la hinchada tricolor recibió al equipo y le dio su apoyo. Ya que el once titular que presentó Aníbal Biggeri estaba compuesto, en su mayoría, por jugadores que rondan los veinte años y que se formaron futbolísticamente en la escuadra de San Martín. Entre tantos lesionados, expulsados y sancionados, el plantel le quedó corto al DT y tuvo que recurrir a pibes de la cantera, quienes estuvieron a la altura del encuentro pero le falto lo más importante, meter el gol.
Con un gran respaldo del público, pese a la tarde fría y ventosa, el Funebrero salió a jugar el partido con una idea clara, tener la pelota, distribuirla y aprovechar la velocidad de los jóvenes. Podría decirse que salió casi todo a la perfección pero faltó concretar las situaciones. La primera parte fue un monólogo de Chacarita, tuvo el dominio del balón y se posicionó en campo de Douglas. Gracias a la claridad de los pases del Piojo Manso, siempre bien ubicado y preciso, y la rapidez de algunos volantes pudo penetrar la defensa del Fogonero, sin embargo la falta de precisión le jugo en contra. Elías Zapata, único delantero, tuvo una chance clarisima debajo del arco, pero el remate fue débil y Perafán lo termino atajando. El Fogonero, no estaba cómodo y, ante la falta de ideas, no logró generar situaciones, por eso apostó al contraataque. De esta manera, pudo crear la única situación clara, en la cual Borrego tiró un centro desde la izquierda, Lenci capturó la pelota y remató al arco, pero Carniel, dijo presente y respondió correctamente. Después, todo el dominio fue del equipo de San Martín pero que al no poder finalizar bien las jugadas, no pudo ponerse en ventaja.
En la segunda mitad, el conjunto de Pergamino salió con otra actitud, de arranque fue en busca del arco del Tricolor y Boló remato desde afuera del área y la pelota se fue cerca del palo. La escuadra de San Martín no se quedo atrás y respondió con una clara chance, nuevamente, en los pies de Zapata, quien controló la pelota en el área, y con el arco de frente, la mando por arriba del travesaño. Luego de esto, el delantero pudo abrir el marcador, pero se enredó él mismo con la pelota y terminó desperdiciando otra posibilidad. Ante este error, la hinchada e incluso el propio Biggeri, perdieron la paciencia y el DT lo sacó de la cancha para poner a Buter. No hubo más peligro en las áreas. La segunda parte fue más pobre que la primera, por eso el Funebrero y el Fogonero, empataron sin goles en San Martín.
El tricolor lleva nueve partidos sin ganar (última victoria en la fecha 10, ante Guillermo Brown por 2-0) y se aleja cada vez más de los primeros puestos. Fue positivo el rendimiento de los «pibes» pero al no meterla, quedó una sensación agridulce para Chacarita.