Nueva Chicago no para, logró una trabajada victoria por dos a uno ante Central Córdoba en Santiago del Estero y sigue como único líder de la categoría con puntaje ideal. El partido estuvo condicionado por un campo de juego que sufrió la lluvia, de todas formas el Torito encontró la ventaja con las dos dianas que Juan Ignacio Sánchez Sotelo anotó en menos de quince minutos durante el complemento. El descuento del Ferro quebró la imbatibilidad de Agustín Silva pero no alcanzó para torcer el rumbo del cotejo.
Lluviosa noche en el Estadio Alfredo Terrera de la capital santiagueña, allí el Club Atlético Central Córdoba de Santiago del Estero recibió al Club Atlético Nueva Chicago en el cierre de la séptima jornada de la Primera B Nacional. El Ferroviario, conducido por Gustavo Coleoni, volvía al ruedo del campeonato tras la postergación de su compromiso ante Ferro y dos igualdades en fila. Por su parte el Torito de Mataderos, dirigido por Walter Perazzo, había logrado ante Los Andes su quinta victoria al hilo en la misma cantidad de cotejos jugados, sin recibir goles; ahora buscaba recuperar la punta tras la victoria de Sarmiento.
El factor climático fue fundamental para el desarrollo de un partido desvirtuado, el campo de juego no soportó las constantes lluvias y la redonda giró con complicaciones en varios sectores del terreno. Y de arranque un centro mal jugado encontró el choque entre dos futbolistas visitantes en plena medialuna del área, la pelota quedó servida al ingreso de Javier Rossi pero el derechazo del Bicho reventó el travesaño; clarísima para Central Córdoba en pocos segundos.
Chicago estaba incómodo en un terreno imposible, sintió lo ausencia de Arnaldo González y se movió realmente lejos de la portería defendida por César Taborda. Central Córdoba también sufrió la imposibilidad de buscar sociedades, fue quien mejor imagen proyectó y tuvo buenas aproximaciones nuevamente con Javier Rossi como protagonista; primero el ex Morón no pudo direccionar el centro desde la derecha, más tarde cabeceó sin ángulo un balón que terminó pegando en el hierro izquierdo de Silva.
El Torito tuvo su bala de plata sobre el cierre, Alexis Ferrero se hizo un lio con la cancha y Facundo Mater le robó la pelota en el ingreso al área local; el Diez tiró un derechazo cruzado que resultó apenas desviado. Final del primer tiempo y una larga espera para el segundo, las líneas de cal se borraron y repintarlas demoró la reanudación.
Ya en el complemento la cosa no varió demasiado, la lluvia persistió y también las dificultades para jugar. De todas formas y a puro olfato Nueva Chicao lograría romper la tensión del cero en apenas doce minutos, Cristian Díaz buscó salir de atrás pero la pelota se frenó en posición de un Jorge Valdéz Chamorro que dominó antes de soltar la habilitación para Juan Ignacio Sánchez Sotelo; el delantero picó habilitado y superando la línea defensiva en velocidad infló la red con certero zurdazo a pie abierto. Arriba el Toro.
Central Córdoba duplicó esfuerzos en desventaja pero su propio terreno lo siguió complicando, Javier Rossi se resbaló debajo del arco tras la habilitación de Jonathan Bay y minutos más tarde Lautaro Robles también patinó al momento de shotear. Al Ferro le costaba simplificar acciones, todo lo contrario ocurrió a un Chicago que estiró ventajas antes de alcanzar la media hora y tras el debut en el torneo de Christian Gómez.
El también ingresado Gonzalo Miceli recibió en la línea media sacando un buen pase profundo para otro desprendimiento de Juan Ignacio Sánchez Sotelo; El Lobo bancó la marca de Vera Oviedo y aprovechando la temeraria salida de César Taborda definió con certero zurdazo en puertas del área grande que terminó cruzando la red con bien direccionada lentitud. Dos a cero Chicago.
Más allá de la ventaja visitante el local lograría su descuento a siete minutos del cierre y tras un lateral largo que Facundo Melivilo peinó al vértice opuesto del área; allí Ramiro Maldonado intentó avanzar cuando Gonzalo Miceli se lo llevó puesto en afán de cerrar, el juez Diego Ceballos no dudó en sancionar penal para el Ferroviario. Hugo Vera Oviedo cobró la factura con buen derechazo cruzado que se clavó contra el hierro derecho de Agustín Silva, el golero acertó la volada pero no llegó a evitar la primera caída de su portería en todo el torneo (532´ reglamentarios).
Lo que quedó de partido tuvo la tensión propia del corto score, y aunque Central Córdoba no fue apabullante sí tuvo su bala de plata: una doble pared entre Nahuel Luján y Lautaro Robles que terminó con este último definiendo fuerte y desviado. Final y triunfazo de Chicago.
Con la victoria Nueva Chicago se mantiene como único líder de la categoría con 18 unidades fruto de seis victorias. El Torito se ubica un punto por encima de Sarmiento y a cuatro de Arsenal, vale destacar que los de Mataderos disputaron un partido menos que los mencionados. El próximo domingo recibirá a Almagro, otro implicado en la lucha alta.
Central Córdoba perdió por primera vez como local en la temporada, lleva tres sin ganar y las seis unidades tienen gusto a poco para un conjunto que llegó a instancias decisivas de la Copa Argentina. El Ferroviario se ubica junto a Olimpo de la zona de descenso para los indirectamente afiliados, pero falta mucho. El venidero domingo viajará hasta Puerto Madryn para enfrentarse con Guillermo Brown.