El regalo llegó del cielo para Unión de Santa Fe, que venció a Boca Juniors por 4 a 3 en un verdadero partidazo en La Bombonera. La muerte del ex jugador tatengue Diego Barisone pegó fuerte en un plantel, que hizo el encuentro de sus vidas con una ayudita de arriba. Los dirigidos por Leo Madelon jugaron con doce: los once futbolistas más «Bari» desde el cielo.
Emocionante. Cambiante. Atractivo. El fútbol obsequió noventa minutos de excelencia. Errores, aciertos, idas y vueltas. Nadie presagiaba el resultado final con el cierre al medio de Britez y el gol de Calleri con un remate fuerte e inatajable para Nereo Fernández. Pero la polémica llegaría a La Boca. Un pase largo del arquero visitante le permitió a Gamba quedar mano a mano con Orión, que lo bajó en el área. Baliño cobró saque de arco pero entre las protestas de los jugadores de Unión y la atención a ambos protagonistas del choque, el juez cambió de decisión: cobró penal y expulsó a Agustín Orión. Ignacio Malcorra no falló y deleitó al público con una ejecución genial ante el ingresado Guillermo Sara. El desorden y las errores individuales le dieron la chance al equipo santafesino para dar vuelta la historia. Cata Díaz se equivocó al parar una pelota y Mauricio Martínez robó, corrió unos metros y definió ante la salida del 1 xeneize. Lo impensado en Alberto J. Armando.
Las emociones nos cesaron en el complemento. A los cuarenta segundos, Tévez disparó rasante desde afuera del área tras un rebote e igualó de manera veloz el encuentro con diez jugadores. El tate se defendió en gran parte del encuentro pero se cerró con efectividad y cuando atacó, lastimó. La sorpresa la brindó Emanuel Britez -que se había equivocado en el despeje en el primero del local-, que después de una jugada de flipper en el área bostera, sólo remató al arco casi desde el punto penal. El 3-2 volvió a cambiar el rumbo del cotejo pero el dueño de casa no se quedó con los brazos cruzados. Por derecha, Gago mandó un centro al área y Calleri empató nuevamente con una palomita imposible para Nereo. La Boca explotó con la igualdad y todo parecía que desembocaba en el cuarto del local. Pero la pelota encierra misterios y no deja que la lógica embarque en el deporte. A los 46 del etapa final, el que mejor trata al balón en el fútbol argentino -Ignacio Malcorra, a nuestro parecer- creó un centro «ultra» preciso para la cabeza de Soldano, que pasó el esférico al medio en donde estaba Gamba para conectar con la «saviola» el cuarto gol para el delirio de los futbolistas santafesinos y de todos los hinchas rojiblancos en la provincias.
Desde el cielo, seguramente Diego Barisone festejó este triunfo. Los tatengues hicieron historia en La Bombonera y ganaron por segunda vez consecutiva -la anterior 3 a 1 cortando una racha de 26 encuentros sin ganar- en el mítico estadio. Con personalidad y un plante inteligente, Unión se llevó EL triunfo de la fecha y desnudó falencias en el conjunto azul y oro. Boca peleó con diez y siempre estuvo a tiro de la victoria pero Unión lo hizo con doce, con «Bari» jugando y alentando desde el cielo, lugar de donde vino flor de regalo para el pueblo tatengue.