ARGENTINA 2 – PARAGUAY 2: DOS CARAS

Siempre es conveniente mostrar la mejor cara en este tipo de competencia como la Copa América. Pero Argentina dejó dos puntos de vista totalmente diferente ante Paraguay con un primer tiempo activo y sin descanso aunque un complemento de dudas y pérdida del control.

No hay objeciones con el trabajo de la albiceleste en los primeros cuarenta y cinco. Pura tenencia de pelota y ofensivo. Así se vio al equipo del «Tata» Martino. Romero y la defensa no tuvieron mucha acción porque esta etapa fue de nuestro seleccionado. Roncaglia y Rojo pasaron bastante al ataque pero lo mejor estuvo en el medio. En la mitad Banega manejó y distribuyó la pelota y Mascherano la recuperó cuando fue necesario. Mientras Di María y Pastore realizaron un buen trabajo por sus zonas. Por derecha, Messi se mostró siempre que pudo a pesar de tener dos o tres marcas encima, igualmente se las arregló para sus destellos con la pelota. Agüero aprovechó un pase errático de la Albirroja, amagó al arquero y definió para el primero. El gol bajó la intensidad del conjunto de Ramón Diaz y los nuestros encontraron más espacios. Sobre el final, le cobraron un penal inexistente -a nuestro parecer- a Di María, que Messi lo mandó a guardar a la derecha del uno rival.

Parecía todo controlado pero en el fútbol no es fácil decir esas palabras. Argentina cambió su cara totalmente y Paraguay también pero todo a la inversa. La Albiceleste se preocupó más por convertir un tercero que por ordenarse abajo y a partir de ahí atacar. Todo salió mal, hasta los ingresos de Tévez, Higuaín y Biglia. Los rivales se despertaron y utilizaron las contras para descontar con un golazo de Haedo Valdez. El descuento no paró la marcha del contrincante y siguió lastimando con varios remates a Romero, que voló unas cuantas veces para salvar a la camiseta. Cuidado, los del «Tata» generaron sus situaciones con Messi y Di María pero faltó puntería. La defensa se vio endeble y eso lo aprovechó su rival, que faltando poco empató el partido con un disparo de Lucas Barrios al lado del palo derecho de Romero. Tévez tuvo la victoria con un cabezazo pero falló.

El empate suena como una derrota. El partido estaba controlado y dos goles de diferencia. Pero una mezcla de baja de intensidad y mérito del rival hizo que el resultado se modificara pero para el otro lado. Dos maneras de jugar y un rendimiento que sólo se aguantó un tiempo. Argentina dejó ver dos caras pero sólo una sirve para lo que viene.

Acerca de Francisco Alí 18287 Articles
Nació un día después del gol del Diego a los ingleses pero llegó justo para el postre contra Alemania Federal. El fútbol es su vida. Escribe de la misma manera que juega: excelente. Por eso es crack. Los Piojos y Atlético Madrid son su debilidad. En 2005 fundó esta locura llamada Vermouth Deportivo.