Con lo justo, sobre el gong, con el último aliento. Los Acereros derrotaron a los Pumas por 1 a 0 en el encuentro de ida de la Copa Sudamericana y en condición de visitante. El único tanto del encuentro llegó recién en el sexto minuto de adición en la complementaria y fue convertido, a través de la pena máxima, por Claudio Sepúlveda.
Fue un encuentro muy parejo entre Antofagasta y Huachipato. Dos elencos de Chile se veían las caras con el sueño de pasar de fase en el certamen continental. Y en el primer chico, en una escueta diferencia, fueron los de sur quienes se impusieron ante los del norte en el costado septentrional del país.
El propietario llegó con algo de peligro cuando Salvador Cordero, en el rectángulo menor, definió apenas desviado frente a un Gabriel Castellón prácticamente entregado a la suerte de su rival. La visita probó suerte con un zurdazo de Javier Altamirano que también salió cerca.
Eduard Bello, con melena maradoniana, tuvo dos oportunidades para el Albiceleste de abrir la cuenta antes de irse al descanso pero en una remató alto y, en la otra, Castellón desvió con lo justo. Pero por esos infortunios del fútbol, los Acereros contaron con un penal en el descuento y Sepúlveda no perdonó a Fernando Hurtado cuando el reloj, en la complementaria, ya acusaba 51 minutos.
Antofagasta masticó bronca y quedó en desventaja para el encuentro de vuelta que se disputará el venidero 6 de abril. Huachipato se impuso por 1 a 0, y nada más, pero le valió para llegar con otro oxígeno a definir la serie en su casa, incluso conociendo que cualquier empate lo mete en la próxima instancia gracias a esa jugada aislada que le permitió cantar victoria gracias al tiro desde los once metros.