Lo vendió por una fortuna, lo repatrió por un préstamo y suponían que por no tener lugar en Chelsea, regresaría a vestir de Nerazzurri. En Lombardía hicieron más de dos ofertas y ninguna sedujo a los Blues aunque también, por parte del delantero, no hubo un esfuerzo para continuar siendo jugador de La Gran Culebra.
En Stamford Bridge ya anunciaron que no se iban a desprender de Romelu Lukaku por menos de 40 millones de euros. Tampoco lo iban a tener en cuenta en la nueva era que ha comenzado bajo el mando de Mauricio Pochettino durante la pretemporada.
Inter sabía que era una oportunidad única para hacer negocio con el equipo inglés que le había depositado 103 millones de euros hace dos años por el mismo deportista que hoy no tienen en cuenta. Sin embargo, en Londres bajaron el pulgar y en Italia se cansaron de esperar.
Otro motivo por el cual el Nerazzurri desistió de continuar buscando a Lukaku ha sido porque el propio atacante no respondió ningún mensaje de la dirigencia ni de compañeros que compartieron camarines hasta finales de junio. Semejante desidia puso final al romance con el goleador belga que podría recalar en Juventus.