El deseo del Lobo se terminó seis días después de la noche más negra que se vivió en el Bosque. En su regreso a 60 y 118, el equipo de Néstor Gorosito se complicó ante el Ciclón. Los de Boedo ganaron por 1 a 0 para tener la última ilusión de soñar con un lugar en la Sudamericana.
San Lorenzo sumó tres puntos vitales para prender todo tipo de velas e imaginarse con un lugar en la competencia internacional durante el 2023. El golazo de Adam Bareiro significó el fin de la ilusión para un Gimnasia La Plata que, durante un gran pasaje de la temporada, fue líder y dominó con justicia en la tabla de posiciones.
Las buenas expectativas del Tripero se fueron diluyendo de mayor a menor. Pudo ponerse en ventaja con un gol de Leonardo Morales aunque el tanto del entrerriano nacido en Villa Urquiza fue anulado por una infracción previa del uruguayo, Guillermo Fratta.
En una contienda que parecía de ajedrez, el Cuervo mostró firmeza en la complementaria. El Lobo sufrió la expulsión de Nicolás Colazo como último recurso tras derribar al ex Fénix, Andrés Vombergar. También padeció un zapatazo de Juan Méndez que se estrelló en el palo.
Si bien el empate le servía al local para seguir afirmándose en puestos de Copa Libertadores, lo que necesitaban los de «Pipo» Gorosito era un triunfo que los deje en competencia. No obstante, a los 19 minutos del segundo tiempo, Nahuel Barrios levantó un tiro libre y Bareiro, de chilena, dejó sin respuestas a Rodrigo Rey.
Con uno menos, y sin energía, Gimnasia La Plata tuvo que resignarse en el resultado y en la ilusión de batallar hasta las últimas consecuencias. En el Bosque festejó San Lorenzo con un 1 a 0 que lo dejó, provisoriamente, a cuatro unidades del último que estaría ocupando una plaza de Copa Sudamericana.