En el estadio Pedro Bidegain, San Lorenzo jugó un mal partido, y sufrió con Argentinos Juniors, aunque pudo vencerlo por 1 a 0 para quedar como escolta de Boca Juniors. El único tanto de la tarde lo convirtió Nicolás Blandi, el goleador del Ciclón. Por su parte, el Bicho fue muy superior, pero no estuvo fino y sumó una nueva caída.
En la previa del encuentro, los dos llegaban con realidades diferentes, pero con la necesidad de sumar los tres puntos. El Cuervo tenía una sola derrota en el campeonato, y buscaba quedar a solo tres puntos del lider del torneo. Por su parte, el Rojo venía de dos caídas consecutivas, y si bien no está muy comprometido con los promedios, no debe confiarse porque una mala racha podría dejarlo nuevamente en los puestos de abajo.
Antes del inicio del partido de Primera, ocurrió algo que en los últimos años no venía siendo habitual. Los equipos de reserva de ambos conjuntos se enfrentaron y terminó siendo con triunfo del local por 2 a 1 con varios protagonistas que ya tuvieron rodaje en los primeros equipos.
En cuanto al encuentro por los puntos de la Superliga, Argentinos había arrancado mejor plantado, y comenzó a inquietar a su rival con la velocidad que le aportaban sus atacantes en los últimos metros. Sin embargo, a los 10 minutos, una nueva pelota parada, tal y como sucedió en las nueve fechas anteriores, fue un dolor de cabeza para la visita. Centro desde la derecha, cabezazó de Paulo Díaz, que estaba habilitado, y si bien encontró una buena respuesta de Lucas Cháves, nada pudo hacer con el rebote de Nico Blandi para que el Ciclón su pusiera al frente. Los de Alfredo Berti eran muy superiores, pero estaban abajo en el marcador, y buscaron de todas las formas posibles para llegar a la igualdad. Alexis Mac Allister dio el primer aviso con un remate desviado, más tarde un tiro libre de Miguel Ángel Torrén que salió apenas ancho, y casi sobre el final del primer tiempo, Gonzalo Piovi ganó en el área rival, y con un frentazo casi empata el marcador, pero la pelota se abrió justo, y se fue casi rozando el poste derecho defendido por Nicolás Navarro.
En el complemento, todo hacía parecer que el Bicho iba a empardar la historia rápidamente. Porque al minuto de juego, Matías Caruzzo intentó barrer a Alexis Mac Allister dentro del área, el volante enganchó y la pelota dio claramente en el brazo del defensor, cometiendo el claro penal. Braian Romero se hizo cargo, pero su disparo se fue varios metros por arriba del travesaño, dejando pasar una ocasión óptima. El encuentro en esa segunda mitad fue puro vértigo. La mitad de cancha no existía, y la visita intentó una y otra vez llegar a la igualdad, aunque siempre se topó con la seguridad de Nicolás Navarro, y con un Paulo Díaz que sacó todo lo que se cruzaba cerca. El Ciclón, por su parte, intentó liquidar la historia con alguna contra, pero ninguna tuvo peligro como para definir el pleito.
En ese segundo tiempo, en el conjunto de La Paternal se dio lo que hacía tiempo se venía esperando, y es que los tres hermanos Mac Allister tengan minutos en cancha juntos, y en Primera. Con el ingreso de Kevin -Alexis y Francis fueron titulares- por Jonathan Sandoval, se dieron el gusto de jugar 30 minutos juntos, aunque el resultado no los favoreció.
Fue final en el Nuevo Gasómetro. Argentinos Juniors intentó llegar a la igualdad, pero tal y como le sucedió en los últimos tres encuentros, desperdició muchas situaciones y otra vez cayó por la mínima diferencia y con un tanto de pelota parada. Por su parte, San Lorenzo jugó el peor partido en la era Pampa Biaggio, pero logró quedarse con los tres puntos y meterle presión a Boca, porque si no le gana a Rosario Central, podría quedar a solo una victoria de alcanzarlo en lo más alto de la tabla de esta Superliga.