En el Gigante de Arroyito, Rosario Central consiguió un nuevo triunfo que lo acerca a los puestos de clasificación a la Copa Sudamericana. Derrotó por 1 a 0 a Tigre con el gol de Teófilo Gutiérrez, quién terminó jugando como titular a último momento por una lesión sobre la hora de Germán Herrera. De esta forma, el conjunto de Paolo Montero sumó segundo éxito al hilo.
Tras haber caído con Godoy Cruz, el Canalla sacó pecho y venía de superar a Quilmes como visitante. Sin embargo, los jugadores querían un triunfo ante su gente que lo aleje de los últimos puestos de la tabla. En frente tenía un rival que venía de quedarse sin DT, ya que tras haber perdido los dos encuentro post reanudación, Pedro Troglio dejó su cargo.
En el primer tiempo, el Matador arrancó mejor parado en el campo, y dominó a su rival en gran parte de esa etapa inicial. Un remate de Alexis Castro hizo lucir al arquero Diego Rodríguez para que envíe la pelota al córner. De ese mismo tiro de esquina, Carlos Luna ganó por arriba y sacó un cabezazo que se fue apenas por arriba del travesaño. Los minutos pasaban, y los de Victoria dominaban y se acercaban con más peligro al arco rival. Diego Morales y Lucas Menossi hacían destrozos en campo canalla, y fue este último quien tuvo la chance de abrir el marcador con un buen remate que fue contenido por la figura de esa mitad, y el responsable de que siguiera 0 a 0, el Ruso Rodríguez, que también le tapó un cabezazo magistral a Oliver Benítez.
En el complemento, y tras algún reto de Paolo Montero, los rosarinos se despertaron. Los roles se invirtieron, y quien dominaba era el local. Un par de buenos ataques en los instantes iniciales advirtieron lo que llegaría a los 16 minutos. Gustavo Colman recuperó una pelota en ataque, y asistió a Teo Gutiérrez que se perfiló y definió en un movimiento para vencer a Nelson Ibañez y estampar el 1 a 0. De ahí en más, el juego se hizo de ida y vuelta. El auriazul buscaba liquidarlo aprovechando los espacios que el rival dejaba atrás, aunque no concretaba; mientras que los dirigidos por Fabián Castro fueron en busca de la igualdad, aunque faltos de ideas, aunque con mucha intención, sin embargo se quedó con las manos vacías.
El pitazo final del árbitro le permitió a Rosario Central volver a festejar en su cancha tras cinco partidos, ya que desde el 1 de Octubre no lo hacía (5 a 0 vs Arsenal). Además, le permite ilusionarse, y acercarse a los puestos de copas internacionales. Por su parte, Tigre jugó una buena primera mitad, aunque en el segundo se pinchó. Sin embargo mostró una mejoría tras la ida de Troglio, y ahora intentará buscar la primera victoria del año cuando reciba a San Lorenzo.
