RAPID VIENA: EL MOSAICO DE SUS RAÍCES

La Bundesliga de Austria tiene tres equipos que nunca perideron la categoría pero sólo uno es su máximo ganador. El elenco verdiblanco, que además ostenta un récord que pocos poseen ya que fue campeón de la Copa Alemania cuando su país fue anexado a territorio germano durante la Segunda Guerra Mundial, jamás traicionó su honor ni tampoco olvidó sus raíces. Así quedó demostrado en la goleada que le propinaron al Slovan Bratislava por 4 a 0 en la ronda preliminar para obtener un lugar en la UEFA 2018/19.

Más allá del triplete de Christoph Knasmüllner y del tanto de Thomas Murg, el Rapid Viena tuvo nuevamente una fiesta en las tribunas. Antes de medirse al conjunto de la capital de Eslovaquia, el dueño de casa presentó un mosaico en la tribuna que hacía honor a la estación de trenes y ómnibus donde se respira la pasión por este equipo que tiene como principal rival al Austria Viena, y como contrincante económico, al Red Bull de Salzburgo que viene llevándose todos los títulos por el apoyo empresarial que otras entidades no están dispuestas a aceptar para mantener sus valores deportivos en alto.

Así fue como cuando los jugadores de la escuadra Verdiblanca saltaron al campo de juego, se encontraron con el dibujo de la estación «Hutteldorf» donde se anclaron por más de medio siglo las raíces de la institución. Luego, y a través de una mágica coreografía, en la misma cabecera mostraron el escudo del distrito al club pertenece la entidad.

También en la previa del encuentro, los hinchas del Slovan Bratislava hicieron de las suyas. Frenaron el subterráneo que los transportaba al estadio y llegaron tarde a la cita. La visita mantuvo siempre una amistad con el eterno rival del Rapid Viena que, goleó dentro y fuera de la cancha. Y ahora sueña con un lugar en la Copa UEFA pero, para ello, deberá vencer en la ronda final al conocido Steaua Bucarest de Rumania que supo jugar una final intercontiental con River allá por 1986.

Acerca de Marcelo Patroncini 20838 Articles
Nació en agosto de 1982. Leonino y soñador. Desde chico jugaba a ser periodista con la máquina de escribir que había en su casa. Amante del fútbol, la gastronomía y los viajes. En 2005 fundó Vermouth Deportivo junto a Fran Alí.
Contacto: Sitio web