La Academia quedó eliminada prematuramente de la Copa Sudamericana. Diagnóstico lapidario en una primera impresión pero con matices que pueden potenciar la mala noticia o apaciguar el resultado frente a un panorama que, tal vez a prinicipios de abril, permita que la derrota ante Corinthians quede prácticamente sepultada en el olvido.

Eduardo Coudet afirmó que Racing tiene un plantel corto y lo demostró en el armado del once titular para medirse con el Corinthians. El único titular indiscutido que saltó a la verde gramilla fue Gabriel Arias. Después, claramente, el «Chacho» fue armando un equipo de atrás hacia adelante con lo que podía.

Con el objetivo principal que es la Superliga, el DT dejó a Alexis Soto por la banda izquierda para no exigir al recientemente recuperado Eugenio Mena. El lateral izquierdo no desentonó y dio notables muestras de ir mejorando su rendimiento con la camiseta blanca y celeste. Por el otro costado, un histórico. Iván Pillud, capitán del equipo en la noche de Avellaneda, tampoco tuvo un mal cotejo a pesar del corto despeje que significó el empate de la escuadra brasileña.

¿Qué más podía hacer Coudet en defensa si Leonardo Sigali se retiró lesionado del clásico y Alejandro Donatti hace rato anda entre algodones?. Sin Lucas Orban, también en la enfermería, optó por el juvenil Rodrigo Schlegel y por Nery Domínguez, un tándem que no pasó sobresaltos porque el Timao prácticamente no atacó.

Julián López, producto del predio «Tita» Mattiussi, jugó un gran partido siendo el primero de su historia como titular en el elenco profesional de Racing. Andrés Ríos no fue el mismo que generó peligro en tierras cariocas. Jonatan Cristaldo fue la única carta ofensiva, anotó un gol, pero falló su penal. Neri Cardozo aportó su experiencia y Augusto Solari tuvo un rendimiento que fue de mayor a menor notablemente hasta cerrar la noche fallando el penal definitivo.

Martín Ojeda, el canterano de Ferro, no gravitó y fue el primer cambio de Coudet. Ingresó Guillermo «Pól» Fernández que, con intermitencias y anotando su penal, cumplió. A falta de 20 minutos para el final, el «Chacho» sacó a Ríos y puso al ex Banfield, Darío Cvitanich, que también acertó desde los doce pasos pero no tuvo mucha participación en la noche de Avellaneda. Y, tal vez, el ingresó de Matías Zaracho se hizo demorar demasiado cuando Solari ya pedía a gritos ser reemplazado porque estaba dentro de una nebulosa sin salida.

Racing cuidó a sus titulares y no estuvo lejos de vencer al Corinthians. Con el 0 a 0 era amplio dominador y, de manera increíble, surgen preguntas cómo si ese resultado hubiese sido mejor que ponerse en ventaja para luego replegarse. ¿Había que apostar a más? ¿Hizo bien en cuidar a sus piezas claves?. Incertidumbres que por el momento generan algo de ruido pero que podrán develarse a principios de abril cuando termine la Superliga.