PUERTO NUEVO: «VOLVER PARA MÍ ES ESTAR EN MI CASA»

Administrador julio 22, 2020


Fanny Papariello es la nueva incorporación de Puerto Nuevo para afrontar la próxima temporada. La atacante proviene de Defensores de Belgrano y será su segundo ciclo en el Portuario.

La volante explicó cómo son sus entrenamientos durante la Cuarentena: “La realidad es que cuando empezó la cuarentena estaba enfocada en ponerme a punto para cuando vuelva el torneo Rexona. Me sentía súper motivada porque ese era mi objetivo. Entrenaba todos los días al menos 1 hora, 1 hora y media. Luego cuando se anunció la finalización del torneo me sentí muy desmotivada, además AFA ni el club daban respuestas certezas sobre nuestro futuro. Eso me llevo a ir ocupando menos tiempo o días al entrenamiento e invertirlo en la facultad. Tener del otro lado a docentes respondiendo inquietudes, enviando material, teniendo zoom se volvió más motivante que entrenar para algo que no sabes. Cumplí años en cuarentena y uno se cuestiona todo el tiempo que es lo que quiere para su vida. Por años postergue la facultad para poder jugar al fútbol  porque me gusta, me hace feliz y la edad, las ganas y el tiempo me lo permitían pero hoy tengo otras prioridades. Terminar de formarme como profesional y acompañar al crecimiento del fútbol también desde otro lugar y no solo como jugadora. Eso lleva a entrenar cada vez menos, y a enfocarme en el estudio. Además empecé a trabajar y solo quiero llegar a mi casa, tomar mate y ponerme a leer”.

“Mi objetivo es recibirme y volver a Puerto Nuevo significa estar más cerca de mi casa y facultad. Seguir jugando al fútbol como a mí me gusta pero a la vez acortar distancias y ganar tiempo para poder seguir estudiando. Además, yo fui parte del plantel que descendió en 2016 y siento que debo aportar mi experiencia y mis ganas al sueño de ascender. Puerto Nuevo me abrió las puertas para ser jugadora de fútbol, y me dio el empujón para darme cuenta que es lo que quería. Volver para mí es estar en mi casa, en el club de mi barrio, en el que crecí, en el que pase tardes con mi familia, en el club que fui a la colonia”, afirmó la atacante.

La volante ofensiva rememoró su experiencia en Softbol: “Jugué muchos años al softbol  porque fue el deporte que pude encontrar más atractivo, ya que en Campana no había clubes con fútbol femenino. Además en la edad que empecé se jugaba mixto hasta cierta edad y era súper llamativo. Jugué  8 años, represente a Campana en muchísimos torneos nacionales y a los 13 años ingresé a la selección juvenil. A los 14 jugué un mundial y también fui campeona argentina sub-17. El softbol me hizo crecer mucho como deportista y como persona. Pero como todo, un día decidí ya no ser parte de la selección, no estaba de acuerdo con decisiones que se tomaban, y no quería ser parte de eso. Así que me dediqué a jugar para el equipo de Campana todo lo que pude, cuando ya no pude jugar el categoría juvenil tuve la posibilidad de jugar con el equipo de Pilar con el cual salí campeona varias veces, y en 2015 el equipo decide no continuar y ahí di por finalizada mi carrera en el softbol. Ya que mi sueño siempre era jugar en Pilar, jugué salí campeona y para mí eso basta y sobra”.

Y añadió: “Salir campeona fue lindo  porque además en un deporte colectivo, la felicidad es mucho más linda cuando es compartida. Así también con los logros.  Jugar el mundial fue un sueño, yo había quedado fuera de la lista  y 4 días antes que el equipo se vaya, una de las jugadoras no entró por edad y me llamaron a mí para irme. Así que fue medio inesperado  pero al fin y al cabo tuve la oportunidad más linda que puede tener un deportista que le dedica tanto tiempo al deporte. Además fue un antes y después en mi vida. Con orgullo puedo decir que defendí la celeste y blanca”.

La mediocampista recordó: «Para mí la UBA fue de las mejores cosas que me pasó. Llegue y me sentí siempre como en mi casa. El cuerpo técnico, más que nada Sergio Guerreiro fue el que me dio esa posibilidad de crecer como jugadora. A los meses que llegue al equipo perdí a mi papá y él ocupó ese lugar que me quedó vacío, recurrí a él no solo en cuestiones futbolísticas sino también personales. Me han avisado que por ser amiga o tener este vínculo con mi DT trataba de conseguir cosas pero nunca fue así  porque ante todo yo entendía que mi vínculo era más allá del fútbol. Jamás use la 10, creo que una sola vez,  ni tuve la cinta de capitana, ni fui titular indiscutida, yo creo siempre en el héroe colectivo y si tenía que jugar alguien mejor que yo, que lo haga. Jamás busque romper o perjudicar, creo en la herramienta del diálogo y la lucha colectiva para obtener buenos resultados. La UBA fue ese lugar que me acogió durante años, en el cual aprendí infinitas cosas y me formé mejor”.

Para concluir, Fanny expresó sus sensaciones de volver al elenco de Campana: “Puerto Nuevo para mí fue el inicio de todo esto. En su momento quizás no tenía estabilidad el cuerpo técnico, lo cambiaban mucho y eso perjudicó al equipo. Además no tenía tanto apoyo la disciplina. Ahora las cosas cambiaron, hay gente comprometida en el club y se formó un cuerpo técnico maravilloso. Espero que dé frutos porque las chicas y el cuerpo técnico se merecen la oportunidad de llegar a primera”.


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