Paris Saint Germain pasó del papelón al lujo en la noche del sábado. El equipo de Mauricio Pochettino arrancó perdiendo ante los Verdes en el Parque de los Príncipes pero luego apareció el astro, Kylian Mbappé, que con un doblete y un pase gol maravilloso puso el 3 a 1 definitivo en la capital francesa.
Al cuarto de hora, Saint Etienne abrió la cuenta aprovechando un grosero de Danilo Pereira. El portugués se trabó en el fondo y Denis Bouanga le robó la pelota para marchar cara a cara con Gianluigi Donnarumma. El nacido en Gabón no perdonó al ex arquero del Milan y de esa forma PSG arrancaba perdiendo desde temprano en otro juego de la Ligue 1.
El dueño de casa intentó reaccionar. Buscó, tuvo la pelota, pero le faltaba firmeza para llegar a la igualdad. Pudo alcanzarla con un tiro libre de Lionel Messi que Paul Bernardoni desactivó contra su caño derecho. En el área opuesta, la visita asustaba con un zurdazo de Arnaud Nordin que salvaba Doannarumma. Sin embargo, los Verdes no pudieron aguantar el triunfo parcial hasta el descanso.
A los 41 minutos del primer tiempo, Messi se volcó por la banda diestra y le metió un gran pase a Mbappé que picó al vacío. El astro francés leyó con inteligencia la jugada del rosarino y metió un derechazo que se tornó inatajable para Bernardoni. De esta forma Paris Saint Germain conseguía algo de tranquilidad en su hogar para irse al entretiempo 1 a 1.
La complementaria fue toda una sinfonía del PSG. Prácticamente desde el vestuario cambió el marcador por completo ya que Messi enganchó para aquí y luego para allá. La «Pulga» desarticuló varias caderas rivales y descargó para Mbappé que definió prácticamente mano a mano el guardameta del Saint Etienne que ya no volvería a desequilibrar en el Parque de los Príncipes.
Si algo le faltaba a la gran noche de la figura francesa fue meter una asistencia tres dedos y con mucha rosca para que Danilo Pereira tuviese revancha de su error. El portugués, que en el capítulo inicial se había equivocado y le daba el triunfo a la visita, se reivindicó con un cabezazo que significaron cifras definitivas en la ciudad de la Torre Eiffel.
La orquesta del Paris Saint Germian continuó con un córner de Messi que estuvo cerca de ser olímpico pero se lo frenó el primer palo de los Verdes. Neymar también tuvo la suya pero no contó con la fortuna deseada. Y el ingreso de Ángel Di María también fue clave aunque sus dos zurdazos no se transformaron en gol por poco. De yapa, Danilo Pereira estuvo muy cerca de marcar otro tanto pero Bernardoni salvó justo en la línea.
Saint Etienne tuvo media hora soñada en el Parque de los Príncipes y se ilusionaba con llevarse una victoria de oro en su lucha por sostenerse en la elite de Francia. Todo eso sucedió hasta que se iluminó Mbappé, metió dos tantos y una asistencia bárbara, y PSG se impuso 3 a 1 para continuar su marcha firme rumbo a un nuevo título en la Ligue 1.
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