Platense y Newell’s hicieron un partido lleno de emociones, goles y errores que terminó en un empate por 2-2 en el estadio Ciudad de Vicente López. Ramiro Sordo y Francisco González anotaron para la Lepra mientras que Nicolás Morgantini y Franco Baldassarra marcaron para el Calamar que mereció mejor suerte por su planteo ambicioso. Los rosarinos perdieron la chance de un penal por una gran atajada de Ignacio Arce. ¡Partidazo!

El juego arrancó con las típicas dudas de un comienzo de torneo. Sin ningún protagonista exclusivo ni situaciones de riesgo ni grandes individualidades. Sin embargo, en una desconcentración de la defensa calamar, una pelota aérea del guardameta Lucas Hoyos pasó por encima de todos los futbolistas locales y dejó a Francisco González solo contra un adelantado arquero Ignacio Arce. El mediocampista tocó al centro hacia el solitario Ramiro Sordo que remató en el área sin ninguna resistencia.

El marrón lo fue a buscar con sus armas con el sector derecho como predilecto con un intratable Maximiliano Zalazar, el juvenil que llegó a préstamo de Boca. De tanto insistir (sin demasiado peligro), Nicolás Morgantini se encontró de frente a Hoyos y definió con suspenso a un empate merecido por las intenciones.

El complemento bajó la intensidad en el juego con las acciones repartidas en la mitad de la cancha y sin riesgos en las zonas calientes. Sin embargo, el conjunto rosarino recibió un penal a favor por una mano en el área y contó con una chance inigualable. El golero calamar, Ignacio Arce, se vistió de héroe con una tremenda atajada.

El maravilloso fútbol permitió que, después del penal atajado, Platense reviviera con un blooper de Lucas Hoyos a quien le pasó una pelota inofensiva por encima de su humanidad y le permitió el gol a Franco Baldassarra que solo empujó la bola a la red gracias a un pase de un rival, Armando Méndez.

El partido no dió respiro y la diferencia no le duró demasiado al equipo de Palermo porque un rebote de Ignacio Arce le otorgó la igualdad a la Lepra a través de un toque goleador de Francisco González.

Los cambios ralentizaron un juego que nunca perdió la emoción por la existencia de errores en ambos bandos. Platense terminó mejor por el empuje y las ganas de llevarse los tres puntos ante sus hinchas que coparon el estadio de Vicente López. Las intenciones marrones no pudieron prevalecer ante la efectividad de Newell’s.

Foto: Prensa Platense