No fue la mejor serie para estar bajo los tres palos en el Bicho de La Paternal. En el partido de ida fue expulsado Alexis Martin Arias y, ya sin cambios, terminó atajando Leonardo Heredia. Para la vuelta se lesionó Federico Lanzillota y tuvieron que recurrir a un guardameta que ni siquiera había debutado como profesional.
Cosas del fútbol e incluso sumamente inesperadas. De hecho, Argentinos Juniors se quedó sin arquero suplente para enfrentar a Fluminense en el Maracaná y quien firmó planilla para ocupar ese lugar ha sido Román Vega. No obstante, la estrella de la noche en Río de Janeiro ha sido Miguel Acosta que a sus 21 años tuvo la oportunidad de estrenarse como profesional.
El guardameta oriundo de Posadas apenas tuvo ocho convocatorias el año pasada con el Bicho y sólo una en el presente año cuando fue el banco de relevos por Copa Argentina ante Olimpo de Bahía Blanca. En tan sólo una semana su vida se plagó de sorpresas y se dio el gusto de debutar, nada más y nada menos, que en uno de los estadios más emblemáticos del mundo.
El juvenil de Argentinos Juniors mostró grandes respuestas. En el primer tiempo rifó una pelota ante un achique donde quedó a mitad de camino pero Fluminense terminó desperdiciando la ocasión. En la complementaria le tapó un cabezazo a quemarropa a Julián Cano. Y así sus primeros pasos como profesional han sido, sin dudas, inolvidable.
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