Al vencer a Talleres el Patrón se aseguró la participación en el máximo certamen continental al mismo tiempo que disputará la Primera Nacional. El último caso fue el de Tigre en 2019.

La proeza fue posible. Patronato no logró mantener la categoría pese a los 40 puntos que hizo en la Liga Profesional pero se coronó en la Copa Argentina. El título le da el privilegio de disputar la Copa Libertadores mientras juegue en la Primera Nacional, algo que ya atravesaron varios equipos.

El primero de ellos fue el Criciuma en 1992 que accedió por ser campeón de la Copa de Brasil. Logró pasar la fase de grupos que compartió con San Pablo, Bolivar y San José. En octavos eliminó a Sporting Cristal y en cuartos no pudo justamente ante el Tricolor. En 2005 y 2006 corrieron la misma suerte Santo André y Paulista y ambos no pasaron la fase inicial.

En 2011 fue el turno de Jorge Wilstermann que fue campeón del Torneo Apertura 2010 pero fue tomado como copa nacional. Y terminó perdiendo la categoría por los promedios. Hizo una pobre presentación con 4 puntos. Caso distinto fue el de Palmeiras que en 2013 ganó el grupo que compartió con Tigre, Libertad y Sporting Cristal y en octavos se despidió con Tijuana.

Los últimos dos casos son mas cercanos. Santiago Wanderers ganó la Copa de Chile y accedió a repechaje en 2018 y quedó en las puertas en la fase 3 cayendo con Santa Fe de Colombia. El último registro fue de Tigre. Se adjudico la Copa de Superliga y en la edición del 2020 jugó la fase de grupos mientras se le hacia cuesta arriba la Primera Nacional del fútbol argentino.

Se verá como le va al elenco de Paraná que se armará para retornar lo mas rápido posible a la elite pero que tendrá el enorme desafío continental.